ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Luis Ureta: Los artistas se alimentan de lo que genera la política

Hoy el ballet es menos elitista. Una nueva muestra plástica en su homenaje.

Imagen
Fecha Publicación: 12/05/2025 - 04:34
Escucha esta nota

Luis Ureta retorna al Teatro Municipal, luego de treinta años, y prepara nueva muestra plástica en homenaje al Ballet Municipal.

¿Cuéntanos, en qué disciplinas artísticas has transitado a lo largo de tu carrera?

He hecho estudios en bellas artes, pintura y escultura, en esta materia. Estudié Ballet clásico con Lucy Telge, danza contemporánea con María Retivoff, danza moderna y tap con Oscar Espínola, también hice estudios con Mónica Camacho y Jimmy Gamonet. Adicionalmente estudié teatro y dirección, pertenecí al coro con la AAA y clases de canto con Manuel Cuadros Bar. Soy egresado de la TUC; entre otras cosas estudié también relaciones públicas e industriales. En Venecia – Italia, hice una especialización con Andrea Jacarosse en estructuras de máscaras venecianas. He participado en más de una decena de montajes escénicos, dentro de los cuales destacan: Don Quijote (Museo de la Nación – Ballet Nacional), Medea (Teatro de la Universidad de Quito), El Público (Teatro Cuatrotablas), Annie (Teatro Marsano), Un Tranvía llamado deseo (PUCP), entre otros. Las artes plásticas, el ballet y el teatro, siempre han marcado algún acontecimiento personal y me han aportado un enriquecimiento de vida con el cual estoy profundamente agradecido.

Me he emocionado haber regresado al Ballet Municipal es lindo y duro a la vez. Digo lindo porque Lucy Telge (a quién incluí en mi obra “Gemmas”) continúa liderando el ballet municipal y eso me evoca a mis épocas de estudiante de danza clásica, una etapa muy bonita que recuerdo con mucho cariño. También, porque la vida me permite compartir una vez más con mis queridos compañeros Patricia Cano, Guadalupe Sosa y Claudio Valdivia. Pero duro, porque ya no está todo el elenco con el que me formé, crecí y trabajé, algunos ya se fueron. Supongo que es nostalgia artística, y recién tomé conciencia de ello, cuando, hablando con una compañera, le decía que hicimos la obra “La Perricholi”… hace unos cuantos años; a lo que ella me contestó…” Lucho querido, ¡hace 30 años que hicimos esa obra!”. Luego, caí en que estaba en lo cierto, y bueno, los años pasan. Además, de mi regreso al Ballet, estoy preparando una nueva muestra plástica, bocetos que he desempolvado, que estaban guardados, estoy incluyendo también fotografías actuales de los ensayos. Está nueva exposición será un homenaje a la gente que ha formado parte del ballet municipal y a la labor educativa que vienen realizando todos estos años de entrega y cultura.

Luis Ureta, ¿qué anécdotas de tu trayectoria, y de tu vida en general, podrías compartirnos?

Definitivamente, mi primera exposición individual, los besos de mi madre, la pérdida de una de las personas más importantes de mi vida, mi entrañable amistad con mi queridísima Mihaela Radulescu, quien ya no está más con nosotros. Los amigos que ya no son amigos, los que se fueron, los que volvieron y los que están llegando. Las exposiciones han llegado a mi vida por algún acontecimiento personal. Por ejemplo, mi exposición “Femineidades”, fue una exposición, un tributo y puesta en valor hacia la mujer como rol en la sociedad, con una óptica masculina que nos concientiza todo lo que ignoramos respecto al rol y problemáticas a las cuales se enfrentan las mujeres. “Mágica”, fue la exposición de máscaras venecianas, que me sano de una perdida muy importante en mi vida, mi compañero de vida, como diría yo, fue un trabajo de artesano en todo el sentido de la palabra, pues fue en arte que me sanó, para mí fue una muestra muy importante a la cual le tengo mucho afecto por obvias razones. Tengo un fuerte compromiso por la reeducación frente a la homosexualidad en la sociedad, por ello hice “Incluyéndonos”, exposición que aborda frontalmente la homosexualidad y cuestiona los prejuicios que aún abundan en nuestra sociedad, aún bastante doble moral. “Tunche” es una muestra que trata el miedo a raíz del COVID-19, para mí fue una proyección de tal temor, materializado y transformado en arte. También, atesoro en mi corazón, una enseñanza de vida que me dio mi maestra Lucy Telge, cuando yo le decía al principio de estudiar ballet, que me dolía todo, a lo que ella me respondía, “ya pasará, Luchito”. Varios años después, le volví a decir que nunca me pasó el dolor y me seguía doliendo más todo el cuerpo por los ejercicios del ballet, a lo que ella muy sabiamente me dijo: “Luchito, el ballet es como la vida, siempre duele, pero siempre vas a poder un poco más”. Eso se me quedó grabado hasta el día de hoy, y lo llevo como una enseñanza de vida.

¿Consideras que el ballet es elitista?

Quizá, antes podría ser considerado una burbuja en Lima. Pero creo que ahora menos, la descentralización, las redes y el trabajo de personas en pro de la cultura están cambiando la realidad cultural para mejor, sin importar el poder adquisitivo. Por ejemplo, tenemos a Maricarmen Silva, quién está haciendo una excelente labor con chicas de San Juan de Lurigancho, Villa el Salvador, Villa María del Triunfo, etc. Dándoles otra perspectiva de vida mediante el ballet como medio para cultivarse y surgir, una labor digna de admirar.

Luis Ureta, ¿la posición política influye en al arte? ¿Te consideras de derecha o izquierda?

En principio fui un activista de izquierda, iba a cuanta manifestación hiciera San Marcos y comulgaba con la ideología política que proponían. También debo reconocer, que por mis compañeros y las generaciones que estudiábamos algún tipo de disciplina artística, teníamos una predisposición hacia la izquierda, puesto todo lo que nos vendían, el pro de la cultura, estudios de calidad gratis, la liberación, etc. Y toda esa farsa que propusieron con tal de captar votos, farsa que creí hasta que Susana Villarán me quitó la venda de los ojos, lamentablemente, yo fui uno de los que creyó y voté por ella. Para mí hubo un antes y después de Susana, me desencanté de una ideología política que creí y defendí. Por ello digo que ahora voy hacia la derecha, creo que a pesar de sus errores y su fanatismo religioso, y lo digo sin acritud, porque yo soy bastante católico porque así me criaron y así me siento más cerca de mi mami, pone las reglas del juego más claras que la izquierda.

Influye en el arte porque los artistas se alimentan de lo que genera la política, todo influye en todo. Me da gusto que ahora la moda pasada de que si eres artista eres de izquierda vaya siendo obsoleta y que ahora haya más artistas de diversas disciplinas, que salgan de un segundo clóset y digan que son de derecha.

Más sobre Luis Ureta

LO MEJOR DE CULTURAL: 

Cynthia Capriata, artista y presidenta de MAV Perú, destaca que la diversidad fortalece la creación artística

Eleine Rodríguez, curadora y coordinadora de Galerías Municipales: “La pintura como espejo que revela y oculta”

Roxiemiro destaca la constante evolución de la restauración de monumentos históricos

Mira más contenidos siguiéndonos en FacebookXInstagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.

MAS INFORMACION EN: