Castillo contra la pared por Movadef
Mientras ministro Maraví negaba vínculos, mandatario recibía a Fenate en Palacio. Censura podría dar paso a vacancia presidencial.
Por César Rojas y Fidel Quevedo
En medio de la interpelación del ministro Íber Maraví en el pleno del Congreso, el presidente Pedro Castillo recibía a la delegación del recientemente reconocido sindicato Federación Nacional de Trabajadores de la Educación, en Palacio de Gobierno. Según el Portal de Transparencia del Gobierno, aproximadamente a las 5:30 p. m. del jueves, un grupo de 17 dirigentes de la agrupación vinculada al Movadef, fachada de Sendero Luminoso.
Cada uno de estos miembros se reunieron personalmente con el presidente, hasta las 7:20 p. m. También participó Alberto Grillón Conigliario, directivo del movimiento marxista paraguayo, Frente Guasú.
Asimismo, los otros participantes, entre ellos Moisés Chipana Chipana, Mauro Concha Villegas, Juan Arosti Taipa, Vicenta Angulo Rejas, Lourdes Maraví Reyes, Edgar Rea Tito, etc., son miembros activos del Fenate Perú.
En ese sentido, vale recordar que Chipana, Rea Tito, Brangil Blas y Roger Apolinar Ortiz también fueron miembros del Movadef. Muchos de ellos figuran en partes policiales por disturbios o han estado presos por terrorismo.
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Precisamente, Fenate fue reconocido por la gestión de Maraví en el sector Trabajo, y su posible censura había llevado a que el premier Guido Bellido anunciara una cuestión de confianza. Esto ponía contra las cuerdas al Congreso, ya que si esto se repite el Poder Ejecutivo podría disolverlo, en forma parecida a Martín Vizcarra hace dos años.
Horas antes, Castillo había tuiteado algo que lo comprometió. En la víspera, había indicado a Maricarmen Alva y otros legisladores que no usaría ese argumento, porque respetaba la independencia de poderes.
“Saludo la visita de la presidenta y voceros del Congreso, que recibimos anoche en Palacio de Gobierno. Coincidimos en que la cuestión de confianza y la censura forman parte del equilibrio de poderes, y son herramientas políticas para mantener la estabilidad democrática”, fue su contradictoria expresión.
Al abrir la posibilidad del cierre del Parlamento, el jefe de Estado estaría incurriendo en incapacidad moral. De nuevo, otra similitud con lo que pasó con Vizcarra, quien mintió respecto a sus reuniones con el “Club de la Construcción”, lo cual le costó el cargo, en noviembre pasado.
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