Rafael Vela tambalea: su manejo del caso Lava Jato entra en crisis tras veto brasileño
El fiscal peruano visiblemente nervioso intenta calmar la crisis tras el sorpresivo anuncio brasileño.
La Fiscalía de Brasil suspendió de manera unilateral y por un periodo de 90 días el acuerdo de cooperación judicial con el Ministerio Público del Perú en el marco del caso Lava Jato, provocando un remezón político-judicial con epicentro en Lima.
El fiscal superior Rafael Vela, figura clave del equipo especial Lava Jato, reaccionó con visible nerviosismo al recibir la notificación formal, la cual llegó esta tarde a su despacho a las 12:15 p. m.
“Es una suspensión temporal por 90 días. Nada se va a caer, nada ha sido afectado. Son versiones mediáticas y de abogados que defienden sus propios intereses”, declaró Vela, visiblemente dubitativo, en entrevista con un medio televisivo.
A pesar de su intento de minimizar el impacto, el gesto tembloroso con que sostuvo la notificación no pasó desapercibido para la audiencia.
La decisión del Ministerio Público brasileño marca un quiebre en la colaboración entre ambos países, justo cuando los procesos derivados del caso Odebrecht atraviesan etapas clave en Perú.
Desde Brasil, las autoridades buscan, según fuentes fiscales, reevaluar ciertos aspectos del convenio, sin detallar los motivos específicos del congelamiento temporal.
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Algunos abogados defensores no tardaron en interpretar la medida como una oportunidad para revertir decisiones judiciales, entre ellas la sentencia contra el expresidente Ollanta Humala.
Wilfredo Pedraza, defensa legal de Humala, incluso anunció que utilizará esta suspensión como parte de su estrategia de apelación. Ante este escenario, Vela acusó a estos sectores de intentar “conseguir en Brasil lo que no han logrado en el Perú”.
Niega colapso pese al portazo
Pese al portazo de parte de Brasil, el fiscal insistió en que no existe una ruptura definitiva. “Es parte de un distanciamiento que ya advertimos desde que Lula da Silva asumió la presidencia”, explicó.
También defendió la validez de las pruebas obtenidas mediante cooperación internacional, poniendo como ejemplo el caso de Alejandro Toledo. “Tenemos respaldo de la justicia estadounidense y suiza”, señaló.
Vela negó que la suspensión afecte la legalidad de las pruebas ni las sentencias emitidas. “Los jueces peruanos han resuelto de forma uniforme que la evidencia es válida”, subrayó. Además, rechazó las acusaciones sobre pruebas ilícitas obtenidas en Brasil: “Todo el material fue recibido conforme a las leyes peruanas”.
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