¿Por qué la NASA guarda silencio sobre cometa 3I/Atlas en su paso por Marte?
Expertos aseguran que acercamiento de objeto interestelar no tiene indicios de manipulación alienígena.
La aparente falta de información de la NASA sobre el paso del objeto interestelar 3I/Atlas cerca de Marte, ocurrido el 3 de octubre de 2025, causó un aluvión de teorías conspirativas en redes sociales.
Algunos grupos incluso insinuaron que la agencia espacial estadounidense oculta evidencias de una posible nave alienígena. No obstante, la explicación es mucho más terrenal: el silencio responde a razones administrativas y científicas, no a una presencia extraterrestre.
El astrofísico Avi Loeb, jefe del Proyecto Galileo y director del Instituto de Teoría y Computación del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian, explicó que la NASA atraviesa las consecuencias del cierre parcial del gobierno estadounidense, lo que afectó temporalmente la comunicación y publicación de datos científicos.
“Los largos retrasos no son una señal de inteligencia alienígena, sino más bien de estupidez humana terrestre”, ironizó el científico, al referirse a la lentitud burocrática que suele acompañar a los grandes equipos de investigación.
El objeto 3I/Atlas fue observado por una amplia red internacional de instrumentos espaciales, entre ellos el Orbitador de Reconocimiento de Marte (MRO), la misión MAVEN y el Mars Express de la Agencia Espacial Europea (ESA).
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También participaron los orbitadores Tianwen-1 de China y Hope de los Emiratos Árabes Unidos, que recopilaron datos mediante cámaras y espectrómetros. Sin embargo, el procesamiento y validación de esas observaciones requiere semanas antes de su divulgación oficial.
Loeb detalló que el ángulo de aproximación de 3I/Atlas al plano eclíptico —de apenas 4,89 grados— es una rareza estadística que despertó el interés de la comunidad científica, pero aclaró que la orientación no constituye evidencia de manipulación inteligente.
Según sus cálculos, la posibilidad de una alineación tan precisa es inferior al 1 %, aunque atribuible a causas naturales. El astrofísico recordó que otros objetos interestelares, como 1I/‘Oumuamua y 2I/Borisov, también ingresaron al sistema solar con inclinaciones inusuales.
“Estos visitantes cósmicos nos invitan a mantener la mente abierta, pero sin caer en la paranoia”, comentó. Mientras tanto, la NASA retomará sus comunicaciones habituales cuando el gobierno estadounidense restablezca su operación plena y los datos científicos superen las fases de revisión técnica.
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