199 años después
Un sábado 28 de julio de 1821 en las cuatro plazas más importantes de Lima, el general José de San Martín proclamó la independencia del Perú. Para llegar aquí tuvimos que pasar por muchas protestas, levantamientos, y manifestaciones indígenas contra la dominación colonial, rebeliones como la de Túpac Amaru II, y batallas donde murieron muchos peruanos para liberamos de la corona española. Lo primero que hizo José de San Martín bajo su Protectorado del Perú fue instalar el 20 de septiembre de 1822 el Congreso Constituyente que fue la primera institución política elegida democráticamente designando a sus miembros mediante elecciones.
Como podemos ver para lograr nuestra independencia y lograr tener un Congreso, tuvieron que pasar tres siglos de dominio virreinal y tuvo que correr mucha sangre. Por eso es incomprensible cómo permitimos y aceptamos que falsos demócratas que siguen agendas extranjeras traten de hacernos retroceder destruyendo la institución del Congreso. No olvidemos que una característica de la democracia es la participación popular en la vida pública, y la vía que nos lo permite es el Congreso donde todos estamos representados. Personalizar el accionar de un individuo o varios en una institución que tiene casi 200 años para desprestigiarla es atentar contra todos los peruanos y quienes lo hacen deben ser considerados traidores a la patria. El Congreso es el único que puede parar las agendas antipatriotas; cuando el gobierno ya no lo hace, es el equilibrio.
No podemos permitir que los destinos de un país independiente sean dirigidos por un grupo de Organismos No Gubernamentales (ONG) que enarbolan falsas banderas y que solo siembran odio e intolerancia entre los peruanos. Hay que estar claro que no representan intereses nacionales sino los intereses económicos de quienes los financian; por tanto, no deberían participar en discusión alguna que modifique las leyes o reglamentos que nos rigen. Ellos son los causantes de que no tengamos gente capacitada en el gobierno porque para ser seleccionados tienen que estar de acuerdo con su ideología, ellos son los responsables de que nos usen como conejillos de indias. Han muerto más de 42,000 compatriotas este año en los últimos 4 meses y seguirán muriendo más si se los seguimos permitiendo.
Nunca olvidemos las palabras de San Martín el día de la independencia: “Desde este momento el Perú es libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende. ¡Viva la Patria! ¡Viva la libertad! ¡Viva la independencia!”. Han pasado 199 años desde ese día, sigamos construyendo una sociedad realmente democrática y que estas palabras rompan los tímpanos de todos esos que solo juegan para sus propios intereses. ¡Viva el Perú, carajo!
