Atentado contra la educación
En noviembre de 2018, mientras el poder Legislativo debatía un proyecto de ley que pretendía reponer automáticamente a 14,000 docentes “sin título pedagógico”, la entonces ministra del sector, Gloria Helfer (Constituyente y Senadora por Izquierda Unida); así como la entonces viceministra, Susana Helfer, se opusieron a aquella iniciativa.
Es más, Helfer se dirigió de la siguiente manera a toda la representación nacional: “Señores congresistas, Perú espera hace mucho tiempo una educación de calidad. El Minedu estima mucho a los docentes y, constantemente, trabaja por una mejora permanente de su situación. Pero el derecho de los estudiantes a una buena educación es superior a cualquier otro derecho.
” Y recalcó: “aprobar que un grupo de maestros, sin rendir la prueba de conocimientos ni reunir las condiciones necesarias para hacerlo, ingrese de inmediato a la Carrera Pública Magisterial, sería injusto para todos los profesores que se preparan para un examen y creen en la meritocracia.” Un lustro después, el copamiento del ministerio de Educación por la chusma senderista de movadef/corare, sumada a los sindicatos comunistas afines a Pedro Castillo; en connivencia con un Congreso infame –como el que tenemos– y el Ejecutivo encabezado por Dina Boluarte (vicepresidente y ministra todo aquel año y medio de desgobierno del ágrafo golpista Castillo), decidieron doblegarse ante la presión de la dirigencia magisterial extremista. Así, entre gallos y medianoche, con el silencio cómplice del Ejecutivo, el Parlamento aprobó “reponer en el cargo a 14,000 docentes, subdirectores, directores de colegio, que en 2014 desaprobaron la evaluación de la Carrera Pública Magisterial.
” Semejante barbaridad incluye tanto a quienes no alcanzaron la nota favorable como a quienes nunca rindieron dicho examen. Según la exministra de Educación, Flor Pablo, de las orillas caviares, “la aprobación de esta Ley contradice el principio meritocrático de la Ley de Reforma Magisterial (…)
Comprendo que todo maestro necesita ejercer la carrera y tener oportunidades, pero este no es el camino.”
Este atentado contra la educación peruana desatado por un poder Legislativo muy cuestionado por su comportamiento amoral; la incapacidad intelectual de la inmensa mayoría de sus miembros; la visión marxista que ésta tiene del Estado, y la enorme corrupción impuesta por el sátrapa Castillo, ha dado como resultado una malhadada ley, aprobada el lunes por 107 votos favor, 8 en contra y 3 viles abstenciones, para reponer a 14,000 docentes sistemáticamente desaprobados en sus exámenes. Estos retornarán a las aulas de los colegios públicos para seguir malcriando a las futuras generaciones de peruanos, sumándole mayor incultura a la que ya exhibe la niñez, juventud y adultez de millones de peruanos.
La ilusión que despertó la reforma Educativa del segundo régimen de Alan García, ha sido tirada al tacho por el comunismo sembrado en el Estado por aquella banda de comunistas, senderistas, incapaces y corruptos que trajo consigo el reo Pedro Castillo. Dudamos mucho que los padres acepten que sus hijos sean “educados” por profesores infracalificados, ideologizados por el odio que transpira el comunismo.
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