¡Con los días contados!

Vivimos lo que podrían ser los últimos días en Democracia, Estado de Derecho y Libertad, que aún gozamos los peruanos. El zarpazo comunista lo tenemos a vuelta de calle. Tras montar una parodia –a la que se prestó la OEA hace una semana, actuando como marioneta del comunismo regional- el “gallo” Zamora, aún embajador de Cuba en el Perú; el Foro de Sao Paulo; el Grupo de Puebla y la zurda sudaca han colocado a Pedro Castillo al frente de un putsch. Este se encargará de ejecutar la escenificación final del proceso de captura del poder de nuestro país, por parte del comunismo regional.

Quedan, tal vez, pocos días para que el Perú ingrese a la órbita de miseria, hambruna, pérdida absoluta de libertades y permanente violación de nuestros derechos, tanto humanos como universales. Derechos consagrados por la Carta de la ONU que, desde hace décadas –y sin esperanzas de que acabe su espantosa pesadilla- carecen los vecinos venezolanos, cubanos y/o nicaragüenses.

Mirémonos en el espejo de esas hoy infrahumanas sociedades, que ahora viven en una cloaca comunista porque prefirieron actuar como el avestruz hundiendo sus cabezas para no ver, no escuchar y no protestar, ante el tráfago usurpador del marxismo que acabó clausurando –y/o ocupando, lo que es lo mismo- los parlamentos de aquellas naciones, so pretexto que sus ex congresistas eran “enemigos del pueblo que impedían que los gobiernos revolucionarios rescaten al ciudadano del maltrato y la sobreexplotación a la que lo someten, tanto las castas política, económica, social y gremial de la derecha, cuyo propósito es dedicarse a vivir del pueblo”.

¡Los peruanos NO debemos portarnos igual! Conocemos lo que ocurre cuando la gente prefiere vendarse los ojos, taparse las orejas y cubrirse la boca ante la verdad. Justamente por quedarse inertes, contemplando ante sus propios ojos la imposición de las típicas estrategias que usa el comunismo para capturar el poder, Venezuela, Cuba y Nicaragua sufrieron el cierre del Congreso y elección a dedo de otro Parlamento digitado por el tirano de turno.

¡Esto, en simultáneo a instalarse una asamblea constituyente, promovida como solución a todos los males del país! ¡Cuando está demostrado que las constituciones no resuelven nada! ¡Son solamente los buenos gobernantes los que promueven trabajo, ingresos, seguridad y paz entre sus sociedades! ¡Lo opuesto a lo que genera aquel poder autocrático integrado por gente incapaz, corrompida, mentirosa, como Pedro Castillo, entronizada por la clásica cúpula del poder bolchevique, acostumbrada a mangonear a través del dictador de turno!

¡Estamos a tiempo! ¡El lunes entrante, el Congreso debería someter a debate y al voto la moción de vacancia al presidente Castillo! Preferible jugar al todo por el todo, que dejar hacer, dejar pasar, conociendo que la cobardía significará el fin de nuestra democracia. ¡No tenemos tiempo que perder ni tampoco gestión que dejar para mañana! ¡La situación es gravísima! El presidente del Congreso necesita mostrar que no sólo tiene coraje y decisión, sino persuasión suficiente para que el Congreso defienda sus fueros, evite su clausura y salve a la Patria.