Defínase ya, presidente Boluarte

Está comprobado que la presidenta Dina Boluarte no sólo no tiene idea de lo que es gobernar un país. También carece de reflejos para entender que, en las actuales circunstancias, perseverar en mantener a un cuestionado ministro de Economía –quien, además, ejerció ese mismo cargo durante los aciagos dieciocho meses de desgobierno del golpista, ágrafo, corrupto Pedro Castillo– es principio contraindicado desde todo punto de vista. El citado ministro, llamado Alex Contreras, adolece de la preparación profesional indispensable para ejercer este cargo, en los delicadísimos momentos sociopolítico y económico-financiero en que se encuentra nuestro país. El solo hecho de que Contreras –cuya obesa figura incuso está desaconsejada para ser ministro de Economía de un país donde, en estos momentos, campea el hambre– haya sido el hombre de confianza de Pedro Castillo para dirigir las finanzas del Perú durante el desgobierno comunista que él liderara. Esto lo descalifica desde todo punto de vista para formar parte del gobierno de Dina Boluarte que, se suponía, es democrático y, dizque, distanciado del marxismo leninismo que impuso aquel plan de gobierno de la dupla Castillo-Boluarte. Nos referimos al peor régimen de nuestra historia, dirigido por Castillo como presidente, y Dina Boluarte como vicepresidenta; pero a la vez ministra supervisada por el marxista-leninista Vladimir Cerrón, titiritero de Perú Libre, partido al que pertenecieron (¿o siguen perteneciendo?) tanto Castillo como Boluarte.

Recordemos que para imponer –de facto– el poder, entre las primeras medidas que debe adoptar un régimen comunista –como fue el de Castillo/Boluarte– es dinamitar la economía y volar en pedazos el aparato productivo. ¡Así empezará de cero a edificar el apparatchik comunista, como sistema de gobierno y modelo de vida! Cumplido lo cual, el pueblo quedará supeditado al “nuevo orden político”. ¡Este es el ABC de toda revolución comunista en la región! Ocurrió en Cuba e igualmente en Venezuela. ¿Por qué no pensar, entonces, en que Contreras es un topo marxista impuesto en el MEF, precisamente, para destripar nuestra economía y allanarle el camino a esa revolución comunista que prometiera el plan de gobierno de Perú Libre, partido de Castillo y Boluarte? Dos años y medio después de que el régimen Castillo-Boluarte capturase el poder –gracias a un sospechoso jerarca del JNE– Boluarte mantiene a una persona contraindicada ejerciendo un cargo táctico en un régimen democrático, como ella misma presume. Pero, presidenta Boluarte, la realidad no cuadra con su discurso de ser “presidenta de un régimen democrático”. Lo dijimos desde el primer momento que usted se instaló en la jefatura del Estado. ¡¡Desconfiamos de usted!! Y permanecemos repitiéndolo tres años después, con sospechas más que certeras de que “algo se pudre en el Perú”. ¡Y ese algo es su gobierno, presidente Boluarte! ¡Defínase y no engañe más al país! O cambia a su ministro de Economía y coloca en ese cargo a alguna figura de altísima credibilidad profesional y reconocido talante democrático; o los peruanos estamos notificados de que, el suyo, es un gobierno heredero de su primera fase como vicepresidente del ágrafo, golpista, comunista Pedro Castillo.

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