Día del exportador
En 1973, cuando se creó ADEX, las exportaciones peruanas sumaron US$ 1,112 millones, tuvieron que pasar 31 años para superar los US$ 10 mil millones y por ese motivo, el gobierno de turno declaró el 9 de noviembre de 2004 como el Día del Exportador.
Ese año los despachos al exterior cerraron en US$ 12 mil 809 millones, fue el resultado del esfuerzo de los empresarios, el trabajo de varias instituciones públicas y el proceso de apertura comercial que nos permitió firmar importantes acuerdos comerciales.
Si bien las últimas décadas han sido complejas por las crisis políticas y por factores exógenos sobre los cuales no tenemos mayor control, lo cierto es que las exportaciones se han convertido en uno de los motores más importantes de nuestra nación.
En 2022 exportamos por alrededor de US$ 63 mil 600 millones, varios de nuestros productos lideran los rankings mundiales, es el caso de los arándanos, uvas, quinua, espárragos frescos, pota, palta y otros. No fue suerte, fue el resultado de la estabilidad, marcos jurídicos promotores y estables en el tiempo y empresarios dispuestos a invertir.
En su momento, la Ley 27360 (Ley de Promoción Agraria), ya derogada, se convirtió en la pieza fundamental que impulsó el despegue de las agroexportacioes. Asimismo, la Ley 22342 (de exportaciones No tradicionales), apoyó el crecimiento de la industria; sin embargo, su errónea interpretación le ha restado mérito y sus efectos positivos se redujeron.
Nuestra actividad no solo genera divisas y empleos, también contribuye a la descentralización, regiones como Ica, La Libertad, Piura y Lambayeque gozan de pleno empleo y se han convertido en polos de desarrollo, evitando el centralismo de los 60 y 70.
Lamentablemente, y por las causas ya mencionadas, los envíos al exterior cerrarían este año con una caída de -1.3%, y en el 2024 se espera un modesto crecimiento de 1.9%. ¿Qué hacer? Sugerimos no solo promover la inversión en infraestructura, reducir los sobrecostos laborales y logísticos, sino impulsar medidas que impacten de forma positiva en los sectores con mayor potencial.
El gobierno presentó hace 2 días el plan ‘Unidos’, que es un buen inicio, pero necesitamos medidas de alto impacto ad hoc para los rubros con mayor potencial. Además de la agroindustria, acuicultura, turismo, construcción y minería, sumemos a la industria forestal, la cadena textil-confecciones y el químico-farmacéutico que podrían convertirse en los nuevos motores que enciendan la economía.
En esta fecha especial, debo resaltar la labor de todos los integrantes de la cadena exportadora, a los fundadores de ADEX y en particular a nuestro expresidente Boris Romero Accinelli, quien ayer viernes partió a la eternidad. Lo recordaremos por haber sido un visionario y pionero, su trabajo ayudó a construir las exportaciones. Mantendremos su legado.
Finalmente quiero reiterar el compromiso de todos los exportadores con la lucha contra la pobreza, la informalidad y el centralismo. Las exportaciones no solo transforman oro en joyas, madera en muebles, hierro en barras para la construcción, frutas, hortalizas y pescado en conservas, también cambia vidas.
Presidente de ADEX (*)
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