¡El Perú aún no está liquidado!

Palabras celebres del historiador y político Jorge Basadre, un peruano que dio muestras de su inmenso amor por el Perú y que es menester traer a la memoria en estos tiempos en que la patria atraviesa situaciones difíciles de toda índole, no se equivocó cuando radiografió el pasado, presente y futuro de los políticos y las clases de ciudadanos que nos tocaría enfrentar en el país. ¿Realmente lograremos limpiar toda esta inmundicia que en su paso van dejando los politiqueros? Claro que sí, urge el llamado a autoconvocarse a los que denomino ¡PERUANOS DE BIEN! No podemos seguir siendo espectadores de ventana, mientras el sarcófago pestilente se abre dando pase a avezados truhanes, satrapas, vividores del erario nacional, en la creencia que arropándose detrás de mozalbetes son nuevos partidos cuando en realidad son reciclados.
Y que, decir del irrespeto a la decencia y ley de Partidos Políticos cuando vociferan sin escrúpulos que un Hernando de Soto, Keiko y Alberto Fujimori, Antauro, Verónika Mendoza, César Acuña, José Luna Gálvez, Carlos Añaños, se proclaman candidatos presidenciales cuando éstos previamente deberán ser sometidos a elecciones internas con participación de militantes, acaso de manera voluntaria y espontánea, han cumplido con su deber de enseñar sus cartas de ciudadanos coherentes y consecuentes, mensajes de decencia, honestidad, pueden decir levantando la cara que gozan de aval de estar lejos de lavanderías o vinculados a negocios o entuertos, una vez más demostración clara que no han dejado las malas mañas de la dedocracia dando por hecho el imperio de “Don Dinero”.
No podemos permitir que en las próximas elecciones reinen los impúdicos, chaveteros, compadrazgo, las bandas de patotas, los boca sucias y desdeñemos a los que traen mensajes de coherencia, sinceridad, honradez, honestidad, lealtad, responsabilidad, de aquellos que durante sus actos de vida han sido coherentes y consecuentes, dejando que el Perú sea reducido a una calculadora de sumas, restas, divide y multiplica.Frustra pensar que nuestro pueblo peruano no aprenda de los golpes, que rinda pleitesía al aprovechamiento, desbande, caos, litigio, tráfico en todas sus modalidades, saqueo; que no les inquiete el futuro de la niñez, juventud y sus familias, que nuestra sociedad quede atrapada y no se proyecte, que pierda las esperanzas de ver un país con futuro prometedor, un camino liberado de los obstáculos, ser testigos del horizonte bello y luminoso.
Tenemos una tarea que nos hemos impuesto los ¡Peruanos de bien! los respetuosos del legado Basadre, no permitir y dejar que el Perú sea liquidado! Nos queda un año y ocho meses labor maratónica y gigantesca para crear e inaugurar escuelas de docencia y decencia política, con mirada estadista en la construcción de un país mejor.
Un versado columnista decía y no se equivoca, “que edificar con barro, sin cemento y fierro es impartir ciencia frágil”, y eso no queremos.
No podemos cegarnos a reconocer que la ciudadanía se vuelca a diario a consumir alimento contaminado en redes sociales que están plagadas también de desinformación (medios señal abierta), gestos y figuras públicas obscenas, vocabulario reclusorio, egolatrías, vanidades, personajes pintorescos, de todo como en botica.
La generación, mi generación, tú generación no puede quedar inerte, perpleja ante la avalancha que se avecina el 2026, estamos notificados y advertidos, seremos representantes y voceros del quehacer político, se enseña con el ejemplo, servicio a la patria, Amor y Fe, porque las palabras tienen poder sea para bien o para mal y estas brotan del corazón de quien las pronuncie.
He dicho.

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