Generaciones de los derechos
Los derechos de los que gozamos hoy en día se han ido desarrollando en el tiempo, luego compilados y consensuados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (ONU, 1948).
Estos derechos se han desarrollado y ampliado poco a poco hasta nuestros días, por lo que hacemos una toma legal de ellos en el sentido de cómo han sido apreciados por las diversas naciones del mundo, dando a conocer las generaciones de los derechos humanos (Vasak, 1979) que es la forma pedagógica más interesante para clasificarlos.
Como premisa básica debemos recordar que los derechos humanos contienen el espíritu de reconocer y respetar la dignidad humana, por lo que cualquier clasificación que se realice sobre ellos carece de la primacía de alguno sobre otro. Todos tienen el mismo nivel de importancia, no existen gradaciones ni jerarquías entre ellos y deben ser tratados en forma global.
Empezaremos con los derechos civiles y políticos que son considerados de la Primera Generación, que surgieron de la necesidad imperiosa de reconocer las libertades individuales y participación activa de los ciudadanos en el gobierno de su nación. Estos tuvieron como base la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, aprobada en Francia por su Asamblea Nacional Constituyente, luego de la Revolución Francesa.
Después tenemos a los derechos económicos, sociales y culturales como Segunda Generación. Ellos contemplan la igualdad y garantizan condiciones de vida digna para todos los ciudadanos. Fueron reconocidos como tales luego de la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) e incluyen también aspectos laborales y de seguridad social.
Finalmente, contamos con la Tercera Generación. Son los que corresponden a la sociedad en su conjunto o a grupos de ellos que comparten intereses comunes; es decir, la práctica de la solidaridad a fin de propiciar relaciones armoniosas, pacíficas y constructivas. Estos surgieron a finales del siglo pasado como una forma de afrontar los nuevos escenarios y retos de la humanidad, tales como la paz entre las naciones, el desarrollo sostenible y la obligación de contar con un ambiente sano y equilibrado.
Adicionalmente, y como producto del avance científico, hoy se conversa a nivel internacional de una Cuarta Generación que versa sobre tecnologías de la información y la comunicación.
Ahora que conocemos algo más de los derechos que tenemos, vale la pena preguntarnos si es retrógrado el exigir respeto y compromiso con estos derechos.
Nelson Mandela dijo al respecto: “Privar a las personas de sus derechos humanos es poner en tela de juicio su propia humanidad”.
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