Insurrección por retraso de justicia electoral

Corrientemente insurrección es levantamiento del pueblo contra su gobierno. En el presente caso es contra el JNE por no proclamar inmediatamente al ya ganador Castillo en elecciones limpias sin asomo de fraude, reconocido nacional e internacionalmente.
Keiko, candidata del Perú alienígena, reconoció la limpidez en el primer cómputo oficial, el mismo día sobre el 62% electoral que le daba 5 puntos porcentuales de ventaja pero al final en el cómputo general resultó perdedora. Entonces cambió de posición invocando fraude en mesas y luego fraudulenta toda la segunda vuelta.
Finalmente, Keiko ha declarado que no reconocerá la presidencia de Castillo y que de asumir éste la presidencia, actuará con arreglo al artículo 46 de la Constitución: La insurgencia: «Nadie debe obediencia a un gobierno impostor… la población civil tiene derecho a la insurgencia».
Esta situación no es insurgencia sino más bien rebeldía ante un resultado nefasto para ella. Rebeldía que empezó con el acoso abierto a 3 de los 4 miembros del JNE, consistente entre otras medidas en sitiar sus domicilios. Y desde anteayer, sus huestes han ocupado el Paseo de los Héroes navales frente al Palacio de Justicia con la complacencia tanto del presidente Sagasti como del alcalde de Lima.
Una vez proclamado Castillo como Presidente, esto ya sería una insurrección contra el Estado pasible de prisión (Constitución. Art. 45).
Por la vía del Congreso, con su mayoría calificada también está actuando: acoso de censura a su mesa directiva, nombramiento írrito a vocales del TC. Así ganar días para la instalación del nuevo Congreso cuyo presidente asumiría interinamente la presidencia del Perú.
Sin garantías elementales, el presidente del JNE, intimidado, no se atreve a proclamar a Castillo y ni siquiera a poner fecha. Por ello, ha acogido las leguleyadas y la conspiración de 63 altos mandos militares en retiro.
Significa que el 28 de julio no estaría Castillo en la Presidencia y que en agosto, el JNE daría aunque sea por pocos puntos ganadora a Keiko. Entonces, Castillo estaría exiliado dorado en Miami o preso en Challapalca.
Castillo debe tomar cabal conciencia que es el candidato del Perú profundo y comportarse a ese nivel; es decir, tomar Lima con 150,000 entre ronderos, aguerridos comuneros de Cotabambas, Chumbivilcas y Espinar y etnocaceristas dando garantías al JNE y al presidente Sagasti y con poder social propio, asumir la Presidencia constitucional del Perú este 28 de julio. La victoria del Perú profundo es vital camino del Perú a potencia mundial.

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