Los fiscales que nos traicionaron
Los fiscales José Domingo Pérez y Rafael Vela Barba siempre fueron falsos valores, prohijados por la cultura caviar y retroalimentados por la prensa venal, que hace décadas manipula a la sociedad imponiéndole sus doble conducta. Ambos sujetos urdieron -y ejecutaron- un acuerdo secreto con la corrupta Odebrecht, para que “entregue información privilegiada”, respecto a nombres y detalles correspondientes a los intermediarios que recibieron dinero ilícito, bajo cualquier modalidad, procedente de las arcas de esta constructora afín a Lula. Aquella estafa le generó al Perú un perjuicio no menor a US$7,000 millones! Pérez, Vela y Odebrecht suscribieron un pacto secreto -a sola firma- que apela a eliminar toda acusación criminal contra los ejecutivos y dueños de esta firma brasilera.
Vale decir que el Estado peruano no presente cargos contra ellos ni contra la compañía. En simultáneo, Odebrecht se comprometió a cero acciones penales contra Estado peruano; consecuentemente contra sus autoridades, etc. Y Perú acordó no procesar a las subsidiarias de Odebrecht, instaladas en paraísos fiscales. ¡Con mayor razón, contra el holding principal domiciliado en Brasil! Un canje de favores entre Odebrecht, Vela Barba y Pérez Gómez, que equivale al más atrevido sometimiento de ambos fiscales al capricho de una transnacional conocida como por ser de las más corruptas del planeta. Pérez y Vela actuaban como si estuviesen tratando con El Vaticano. ¡Evidentemente Odebrecht los engañó! ¡No dio los codinomes que prometió para descifrar los servidores secretos que descubriera la Fiscalía Suiza! ¡A estos codinomes sólo accedían contadísimos ejecutivos de Odebrecht, revelando las intenciones criminales de Odebrecht para lavar dinero, trasegándolo luego como soborno a sus socios peruanos. Ello incluía a presidentes como Toledo, Humala, PPK, etc.; además de funcionarios de ministerios, entidades estatales peruanas, etc. ¡Por tanto el material que Odebrecht entregó a los fiscales Rafael Vela y José Pérez valía cero! ¡Carecía de los “codinomes”! La culpa de tamaña estupidez es de Vela Barba y Pérez Gómez. Ambos deben sus puestos a una inútil Junta Nacional de Justicia. ¡Ambos pactaron en secreto con la constructora, sin cerciorarse del cumplimiento de los acordado! Esta traición no puede ni debe quedar impune, amable lector. Vela Barba y Pérez Gómez son responsables de que hayamos sido traicionados por incapacidad de ambos fiscales, quienes ahora podemos deducir que jamás pusieron su mano al fuego por nuestro país.
Pérez Gómez y Vela Barba pactaron con Odebrecht que Perú no demandase a los dueños y ejecutivos de Odebrecht. ¡Sin embargo Odebrecht ha demandado al Perú; hasta hoy, por US$1,900 millones! Pero, eso sí, Perú está impedido de llevar a Odebrecht –a la compañía, sus accionistas, ejecutivos, etc.- ante toda instancia de nuestra Justicia. ¿Los calichines Vela y Pérez cayeron en las red de una empresa pervertida, como Odebrecht, que, con engaños, nos impidiese tener los “codinomes”; o semejantes trampas son fruto de algún arreglo bajo la mesa con ella? ¿Tan candelejones son Vela y Pérez? Dicho sea de paso, con absoluto descaro, hoy Odebrecht contrata con el Estado peruano, debidamente blindada bajo un nuevo nombre. ¡Y no pasa nada!
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