Parásitos

Recién juramentado, Rómulo Mucho advirtió que el Estado ya no destinaría el dinero de los peruanos al despilfarro en Petroperú. No había terminado el besamanos y ya firmaba el Decreto de Urgencia 04-24 asignando 800 millones de dólares para alimentar a la tenia solitaria que parasita del pueblo peruano hace 55 años.

El pretexto es el de siempre: garantizar el abastecimiento del combustible más caro del mundo. La modalidad, la misma. La presidente y los ministros constatan que ninguna entidad financiera concede crédito a la tenia solitaria, así que ordena al Banco de la Nación entregarle los 800 millones para cebar a los parásitos.
Rómulo Mucho firma un decreto que fija el plazo de devolución “en menos de un año” y con un mucho de distracción enfatiza que el Decreto de Urgencia 04-24 es una ampliación del 023-2022, decreto que entregó 500 millones de dólares, igualmente, para devolver “en corto”.

Boluarte, Arista y Mucho definen como “desfases” los incumplimientos en la Nueva Refinería Talara, lamentan como un imprevisto que las calificadoras de riesgo certifiquen como incobrables los préstamos otorgados a Petroperú, imputan al fenómeno del Niño Global el costo de los fletes, y así, entre bla bla blá y ayayay, deciden que los compadritos y perdularias se han ganado 800 millones más del bolsillo de todos los peruanos.

Con una perogrullada, Boluarte, Arista y Mucho concluyen que el despilfarro no ha permitido controlar el despilfarro, así que hay que aflojar más millones para garantizar la molicie burocrática.

Pero la alcahuetería se pone peor. Los parásitos ofrecen como garantía de pago, los inmuebles inscritos a nombre de la empresa estatal. De acuerdo con este criterio, los predios de las empresas públicas, no son propiedad del Estado; son propiedad de los parásitos que viven de esas empresas. Y como son de su propiedad, los ofrecen en garantía. Que la presidente Boluarte diga que la venta de todos los predios inscritos a nombre de Petroperú servirá para recuperar los 1,500 millones de dólares dilapidados, la coloca en plan de cachinera.

La Ley General de Sociedades, Artículo 407 dispone que las sociedades deben ser liquidadas cuando las pérdidas reduzcan el patrimonio neto a cantidad inferior a la tercera parte del capital. El patrimonio de Petroperú asciende a 1,100 millones de dólares. Sus obligaciones suman 8,500 millones, más los 1,500 de los decretos de urgencia, 10 mil millones de pérdidas.
Hace mucho tiempo que fue hora de tomar el purgante con el que el pueblo peruano evacúe los parásitos que lo debilita. Será una fétida, pero saludable diarrea.

Por Alfonso Chunga Ramírez
alfonsochunga@gmail.com

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