¿Por qué liberar las AFP?

¿De qué te sirve tener ahorros si cuando los necesitas no los puedes usar? Si hoy tienes deudas que te agobian y no puedes pagarlas a pesar de tener la plata en un fondo, ¿para qué te sirve el fondo? ¿Para un futuro que nadie sabe si llegará?

A pesar de ser calificado como populista y de no pensar en el futuro, estoy convencido de que el Congreso debe aprobar la liberación de fondos de las AFP, hasta incluso considero que no solo debe ser por los S/ 18 mil que plantea la mayoría de proyectos, sino de un monto más elevado que sea destinado a pre pagar o pagar créditos hipotecarios del afiliado.

Sé que hay una baja cobertura, que hay escasa cantidad de personas protegidas por la seguridad social en pensiones, que sólo 2 a 3 de cada 10 trabajadores tendrá en el futuro una pensión, por la alta tasa de informalidad laboral (alrededor de 70%), pero el “futuro” es hoy.
Sé también que los congresistas pueden tener un objetivo populista con esta propuesta, sé que se perjudicará a un grupo de afiliados de las AFP en los siguientes años, pero estos retiros son VOLUNTARIOS, es decir quien considere que no los necesite, pues los deja en el fondo ganando rentabilidad.

Sin embargo, el argumento más notorio que tengo es que, así como vamos el siguiente gobierno podría ser uno más radical, tipo Antauro Humala, y podría apropiarse de esos fondos para sus fines políticos y la lluvia de subsidios que empezará a regalar por todo el país, y esto acabará no solo con la jubilación de miles de peruanos, sino pulverizará el ahorro de más de 4 millones de personas.
¿Quién garantiza que esto no sucederá? Ejemplos tenemos y cerquita, como Bolivia y Argentina.
Un buen liberal no debería estar de acuerdo con las AFP ya que es una obligación ingresar a una, pues consideran que somos incapaces mentales para poder manejar nuestros ingresos.
Esta inyección de capital iría directamente a los bolsillos de los peruanos y eso movería el consumo, reduciría las deudas en el sistema y quizá se recuperaría esa caída de 14% en la recaudación tributaria. Y al mover la aguja empezaríamos a salir, ojalá, de esta desaceleración económica.

Es cierto, que lo mejor que puede hacer hoy en el Congreso es diseñar una reforma de todo el sistema previsional (privado y público), asegurando el pago de una pensión básica mínima universal para todos, pero hoy los bolsillos necesitan una inyección de capital y esta es una salida.
Un taxista me dijo: prefiero que me den mi plata ahora y juntarme con amigos para poner un chifa, a que las deudas me maten de la preocupación. O que suceda lo de hace unos meses cuando en plena pandemia la gente se moría por no contar con oxígeno al no poder comprarlo por falta de efectivo, el cual estaba en las arcas de las AFP.
(*) Periodista y sociólogo.

Por Gustavo Martínez V.

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