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Una puta decente que hará del Congreso un burdel respetable

La acusación de una red de prostitución en el Congreso revive viejas prácticas históricas y descubre la hipocresía política.

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Una puta decente que hará del Congreso un burdel respetable.
Fecha Publicación: 20/12/2024 - 20:00
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Las izquierdistas se sintieron heridas en el alma y el cuerpo cuando la prensa afín a sus intereses destapó la supuesta existencia de una red de prostitución en el Congreso. Sin embargo, en la última campaña, alentaron con todas sus fuerzas, con Verónika Mendoza a la cabeza, apoyar a la prostituta Ángela Villón, quien desde las filas del izquierdista Frente Amplio buscaba ganar una curul en el Congreso.

En su campaña la Villón se presentaba como “una puta decente que hará del Congreso un burdel respetable”. Plop. Ese tipo de Congreso imaginario era aplaudido por las camaradas. Replop.

Para los incautos

Para los incautos que creen a pie juntillas que hay una “red de prostitución” en el Congreso –acusación gravísima que, en todo caso, tendrían que probar–, es bueno recordarles lo que los reporteros veteranos hemos visto en el Congreso. ¿Cuál es la novedad? Es una historia antigua que nada tiene que ver con una red de hetairas.

El comedor subterráneo

Por eso, la tradición de tener muchachas “ricas y apretaditas” es más vieja de lo que se imaginan. ¡Abajo la hipocresía! En tiempos irreverentes podemos ubicarla en la presidencia del Senado de Ramiro Prialé (1964-1965 y 1987-1988). En esos años se supo del comedor ahora “descubierto” por la perspicaz Mirtha Vásquez en el subterráneo del Congreso.

Acuerdos civilizados

En ese comedor se reunían los jefes de los partidos o bancadas políticas, que eran ocasionales (como Alva Orlandini, Ramírez del Villar, Luis Alberto Sánchez y otros de ese nivel), para definir civilizadamente los diferendos partidarios, por ejemplo, en materia presupuestaria, cuando no había acuerdo en la desaparecida Comisión Bicameral de Presupuesto.

Artes del Kamasutra

En tiempos más recientes, coincidiendo con el nuevo milenio, cuando el fujimorista Carlos Ferrero Ferrero se unió a las filas de la chakana de Alejandro Toledo, siendo presidente interino del Congreso entre 2000 y 2001, y luego entre 2002 y 2004, aquel comedor, que ya tenía un espacio discreto para las artes del Kamasutra, pasó a jugar un nuevo rol sensual y relajado, dejando de ser un comedor destinado a acuerdos entre jefaturas partidarias.

Cuarteles de invierno

La presidencia de Ferrero tuvo como una de sus características el contrato de anfitrionas: una española, una morena y, al parecer, otras que se ajustaban a los gustos del psicalíptico “Charlie” Ferrero, como una muchacha pacasmayina que hizo perder la cabeza a más de un alto funcionario congresal, incluido “Charlie”, quien ahora está en sus cuarteles de invierno.

“Contraprestación de servicios”

Largo sería contar la historia de las travesuras de “Charlie” en el Palacio Legislativo, la misma que tomó un cariz escandaloso. Por eso las nuevas administraciones fueron más discretas en la costumbre de contratar a muchachas “ricas y apretaditas”. Entonces se continuó con lo que ya estaba “institucionalizado”: un congresista contrataba a una recomendada de su colega o amigo, y, en contraprestación de “servicios”, este hacía lo mismo con otra muchacha recomendada.

Penaban almas embrionarias

Desde esos años, concretamente durante el “reinado” de “Charlie” Ferrero, en el largo periodo del 2000 al 2004, se conoce esa puerta secreta y esa escalera de caracol que conducía a una especie de cama de masajes y al jacuzzi propio de los años del chakanato y de su aliada inseparable, la izquierda. Ya penaban las almas de seres embrionarios aún en gestación.

Vásquez Chuquilín

Por eso, resulta risible el gran “descubrimiento” de la caviar antiminera Mirtha Vásquez Chuquilín, titular de la PCM durante el gobierno de Pedro Castillo y expresidenta del Congreso. “Recién me entero de que aquí había un espacio histórico, muy sofisticado, que seguramente fue construido con algún propósito particular”, declaró Vásquez. Era “un espacio un poco secreto, bastante privado, que me mostraron como algo exclusivo”.

Ojos y oídos vírgenes

La ex primera ministra agregó que, en otro momento, los ambientes estaban mucho más equipados. “Era mucho más sofisticado. Incluso había una cama grande, y en el baño había un jacuzzi, que luego retiraron. También había una cama con masajeador, que supongo que se usaba cuando alguien estaba estresado”, mencionó, como si tuviera “vista y oídos vírgenes”. ¿También recién se enteró de que todo ese complejo del amor fue construido en la época de “Charlie” Ferrero?

 ¿Cambios a la vista?

A raíz de las declaraciones del premier Gustavo Adrianzén, de que el gobierno no conecta con la gente, en el Ejecutivo, están evaluando hacer cambios tanto en PCM como en Palacio de Gobierno. En la secretaría de comunicación social, se cambiaría  a la cabeza ya que no ata ni desata, afirman. Mientras que en prensa de PCM, el encargado, también saldría ahora que su ex está de capa caída y ya no tiene padrino con Nicanor que está fugado.

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