Ya le gustaron los streamers a Rafael López Aliaga: ahora es con Andy Merino (‘Zeein’)
Miles de comentarios inundaron las redes tras transmisión en vivo.
Primero fue el youtuber “Speed” y ahora con el streamer peruano Andy Merino, conocido como El Zeein, con quien Rafael López Aliaga protagonizó ayer una transmisión en vivo que se viralizó al instante.
Fue apenas cuando Zeein le ofreció a López Aliaga una lata de la bebida Four Loko y, con curiosidad, el alcalde preguntó: “¿Qué es eso? ¿Es peruano?”.
Entre risas y bromas, “Porky” aceptó la invitación y tomó un sorbo de la peculiar bebida. El streamer, entre risas, respondió que no conocía el origen exacto del producto y que simplemente lo pidió para la ocasión.
“Qué rico”, dijo el Alcalde al probarlo, provocando risas. Esta naturalidad sorprendió, y miles y miles de comentarios inundaron las redes.
Todo es público
En momentos en que la administración Trump los golpea con un mazazo en la nuca, la nave madrina de las ONG peruanas, el IDL, dirigido por el judío maravilloso Gustavo Gorriti, suelta otro informe sobre el historial de EXPRESO en materia de cambios de propiedad. ¿No es que todo eso se conoce y es público?
Infiltración profesional
En el Perú, bajo el ropaje del periodismo de investigación, se han cometido muchos crímenes, patrocinados por el delincuente Alejandro Toledo, porque fue bajo su administración que se judicializó la política y se crearon entes e “instituciones” como el Consejo Nacional de la Magistratura (hoy CNJ). Se infiltró hasta los tuétanos el Ministerio Público y el Poder Judicial, teniendo como soporte en tales fines la dictadura de la concentración mediática, la misma que aceptó ser manipulada por quien controlaba la Fiscalía: Gustavo Gorriti y su IDL.
Está por investigarse
Eso se vio en el caso Lava Jato y ahí están los resultados. Ningún detenido, ningún proceso ganado por ese equipo especial direccionado por el IDL. Pero las rabonas, en el mal sentido de la palabra (porque las rabonas de la guerra con Chile eran héroes), tenían oficina en la Fiscalía, como bien lo sabe José Domingo Pérez. Todo eso está por investigarse. Una de El Comercio hacía algo parecido —en tiempo real— con Rafael Vela.
No firmó ningún papel
Así que los “rabos de paja” no están en EXPRESO, sino en otro lado. El próximo gobierno se encargará de ellos. El actual ya es cadáver. Entretanto, la historia de este diario, sobre todo en los últimos años, es clara y transparente. Que el señor ministro del Interior fue abogado de esta casa editora, es cierto. Está en los papeles, en Registros Públicos. Fue apoderado de clase B. Nunca firmó ningún papel. Nadie lo ha ocultado. Está, reiteramos, en Registros Públicos. Y en la mayoría de los casos, hemos sido muy críticos de su gestión actual.
No somos parásitos
En consecuencia, como lo ha dicho nuestro director Antonio Ramírez Pando, no hay nada nuevo bajo el sol. Y seguimos creciendo, nuestro personal es puntualmente pagado, no hemos recurrido al fácil expediente de drásticas reducciones de personal. Y el secreto es uno solo: trabajar, trabajar y trabajar. Y decir la verdad y nada más que la verdad. No ser parásitos como otros. Menos aún de USAID y de Soros.
Bobadilla, el provocador
“Según este par de sanguijuelas [Marco Sifuentes y Rosa María Palacios], el Ministerio de la Mujer es ‘indispensable’ porque en el Perú hay muchos feminicidios. Ja, ja, ja. Vaya lógica de idiotas. ¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? ¡NADA! Lo único que les interesa a este par de vividores es que haya un ministerio donde las ONG caviares puedan seguir haciendo negocios. ¡Para nada más sirve ese ministerio!”, escribe en sus redes Dante Bobadilla.
Kafka en la Corte de Lima
Funcionarios del Poder Judicial que pidieron el anonimato nos indican que el caso de la jueza Xuany Reátegui ha desatado toda una polémica. Como se sabe, ella decidió no cumplir la Casación 2607-2004 y la resolución del Tribunal Constitucional sobre el Expediente 04197-2008-PA/TC, respecto a la deuda que la Universidad Ricardo Palma no le paga al abogado Javier Ríos Castillo desde hace más de veinte años.
Sí, pero no
Tanto la Corte Suprema como el TC indicaron que el demandante tiene derecho a cobrar los US$ 354,000 no abonados hasta el 2006, así como un monto de seis mil dólares por cada mes posterior, ya que su contrato nunca se resolvió. Lo malo es que Reátegui ha considerado que el vínculo laboral acabó con el memorando de un funcionario, cuando el artículo 59 de la Ley Universitaria es muy claro en que solo el Consejo Universitario puede tomar esa decisión o rescindir contratos.
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