Javier Bedoya Denegri: «El Partido Morado tiene gente que no ha demostrado una conducta proba»
«Han querido imponernos sus políticas progresistas, como la ideología de género, el aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero demuestran que no tienen cuadros», señala nieto de Luis Bedoya Reyes.
¿Qué opinas de que el Partido Morado esté lanzando a la política a Carlos Ezeta, este sujeto que golpeó cobardemente al excongresista Ricardo Burga?
Es una prueba más de la orfandad política de los partidos políticos que tienen la necesidad de incorporar entre sus filas a gente que no ha demostrado una conducta proba en su vida, y pegarle a un congresista de la República es un hecho cobarde. No es una buena carta para mostrar del Partido Morado.
Ellos se sientan en el trono de la superioridad moral, pero, al final, sus líderes son los más cuestionados, como Julio Guzmán, que huyó de un incendio dejando sola a una mujer, y ahora Carlos Ezeta, que no está preso porque Burga retiró la denuncia.
Ellos siempre son los defensores de los derechos humanos, de los derechos de las mujeres, pero hemos visto a Julio Guzmán huyendo y dejando sola a una mujer en un departamento que se estaba incendiando. Hoy el señor Guzmán, fundador del Partido Morado, no vive acá en el país. Después hemos visto a Daniel Olivares, congresista del Partido Morado, que se armó un troncho de marihuana cuando estaba en una sesión congresal. Por otro lado, tienen al señor Sagasti, quien salió con un autógrafo de Cerpa Cartolini de la residencia del embajador de Japón, como gran admirador. Y ahora tienen dentro de sus filas a una persona que cobardemente ha atacado a un congresista.
Lo querían restituir, pero luego le hicieron la camita a la congresista Silva-Santisteban para que el señor Sagasti asuma la Presidencia de la República. Siempre están buscando tener algún tipo de protagonismo, algún tipo de injerencia en determinadas políticas en el país, pero, a la hora de la hora, han demostrado no tener los cuadros suficientes. Han querido imponernos sus políticas progresistas, como la ideología de género, el aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo, etc., las cuales no comparto. Espero que nunca lleguen al Gobierno, pero lo cierto es que, no estando en el Gobierno, igual impulsan estas políticas.
No están en el poder, pero siempre se acomodan en las altas esferas. Lo vimos cuando sus representantes se reunieron sin reparos con el golpista Pedro Castillo.
Todas estas ideas que sigue y pregona el Partido Morado son políticas que han estado instaladas en los últimos 20 años en el país. Desde Paniagua, han estado metidos en el Estado, no tanto como Partido Morado, sino como personas individuales. Han estado penetrando en el Estado, imponiendo sus propias ideas y eso le ha hecho mucho daño al país.
También es bueno recordar que fue Sagasti el que eliminó los requerimientos para ocupar el cargo de secretario general del despacho presidencial, con lo que pudo asumir Bruno Pacheco.
Laxó los requisitos y después Bruno Pacheco, sin mayores pergaminos, ocupó el puesto. Esto habrá que investigarlo para ver si es que Sagasti lo tenía coordinado ya con Pedro Castillo, para que este señor Pacheco pueda hacer lo que ha hecho: robarle al Perú a diestra y siniestra. También, evidentemente, hay una similitud entre la izquierda radical y la izquierda progresista. Para mí es una incógnita también por qué el Partido Morado pasó la valla en las elecciones de 2021, porque, en realidad, no la pasaron, pero tuvieron representantes en el Congreso. Es un tema que habría que ver y examinar por qué el Partido Morado no perdió su inscripción en las elecciones de 2021.
Pero ellos dicen que son de centro.
Al final se acomodan con lo que les conviene. Les interesa mantener el modelo económico, porque, sin la plata que da este modelo, no pudieran impulsar las políticas que quieren imponernos. Con todo lo dicho, sería un error que Carlos Añaños postulé con el Partido Morado.
Sería un error y una decepción. Él me ha dicho que solo se tomó un café con gente del Partido Morado, no sé con qué propósito o fin. Entiendo que él está conversando con todas las colectividades políticas, sin necesariamente coincidir con ellos. Esa es su estrategia, pero yo no la comparto, porque yo no me siento a conversar con personas con las que no tengo nada que me une.
Marisol Pérez Tello
Quien parece estar cómoda en el Partido Morado es Marisol Pérez Tello.
He visto que ella está dictando en la escuela del Partido Morado y siempre dije que ese era su lugar, que iba a sentirse más cómoda en este tipo de partidos progresistas. El Partido Popular Cristiano no era donde debía estar, porque sus ideas no iban a calar: ella no podía cambiar la historia de un partido de 60 años por tener un cargo de responsabilidad. Me da gusto que, finalmente, haya sincerado su posición, se haya ido del PPC y haga política donde se siente cómoda.
Por Aaron Salomón
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