Hong Kong atraviesa, desde la semana pasada, una tercera oleada de contagios que, para las autoridades locales, se trata de "la más peligrosa" desde marzo.
Según un informe periodístico, las empresas chinas pagaron un poco más de un dólar por cada mascarilla tipo 3M N95, mientras que por las mascarillas desechables desembolsaron US$ 00.4 por unidad.
En su mayoría vestidos de negro, los manifestantes portaban carteles en los que se leía "No a la extradición a China. Carrie Lam dimisión" o "Hong Kong, ponte en pie".