Rutas de Lima es uno de los contratos más perjudiciales para los intereses del Estado, debido a que la empresa Odebrecht se sigue beneficiando con dicha obra gracias a la exalcaldesa, señala.
Brasileña fue la empresa más corrupta en la historia del Perú, pero actual funcionaria Silvana Carrión levantó embargos a Barata. No se le condenó por organización criminal o lavado de activos, solo por colusión en cuatro obras.