Cambio de clima: mitos y verdades sobre el cuidado respiratorio en niños
El uso de frotaciones, la presencia de fiebre e incluso la ingesta de antibióticos que podría ser perjudicial para los menores.
En distintas regiones se observa el cambio de clima, una temporada que resulta ser un reto para padres y cuidadores, ya que incrementan los casos de contagios de enfermedades respiratorias en niños, quienes son especialmente vulnerables a infecciones agudas, una de las principales causas de mortalidad infantil en el Perú.
El Ministerio de Salud (Minsa), reportó más de 300 mil episodios de infecciones respiratorias agudas (IRA) en menores de 5 años, con un preocupante incremento de casos de neumonía y asma. Por ello, es fundamental el cuidado y tratamiento oportuno de estas patologías.
El Dr. Álvaro Altamirano, pediatra y asesor médico de Laboratorios Elifarma, advirtió que en las últimas semanas se elevaron las consultas pediátricas por enfermedades como resfriado común, influenza, faringitis, bronquitis, asma o rinitis alérgica.
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“El clima de la ciudad en esta época se vuelve más húmedo, lo que favorece la circulación de virus”, explicó Altamirano.
Mitos y verdades
El especialista también señaló que aún persisten mitos relacionados alrededor de la atención de las enfermedades respiratorias. En ese sentido, explicó cuáles son los más comunes, con el objetivo de brindar información clara y basada en evidencia:
- El vapor o las frotaciones caseras curan las enfermedades respiratorias: se cree que los ungüentos elaborados a base de eucalipto, menta o tomillo mejoran la tos y congestión nasal; no obstante, la realidad es que estos compuestos pueden ocasionar más irritación en las vías respiratorias y genera más secreción bronquial y en la nariz. El hecho de que alivien síntomas no combate la causa.
- Para cortar la tos es necesario el uso de antibióticos: algunos padres creen que toda tos o resfriado se cura con este tipo de medicamentos; a pesar de ello, la mayoría de las enfermedades respiratorias son virales y no requieren este tipo de medicamentos, que solo son eficaces contra bacterias. Es importante subrayar que la automedicación puede ser peligrosa, por ello, se recomienda siempre consultar a un especialista.
- El asma se cura con la edad: existe la creencia de que los niños superan el asma al crecer; y si bien hay casos en los que sí sucede; la gran mayoría demuestra que esta es una enfermedad crónica que puede persistir o reaparecer en la adultez. Es clave mantener un control médico adecuado y seguir el tratamiento indicado, que suele incluir el uso de inhaladores para reducir la inflamación de las vías respiratorias.
- Si no hay fiebre, no es grave: es común creer que la fiebre es el síntoma más preocupante cuando se desarrolla alguna enfermedad respiratoria; aunque, hay condiciones graves, como bronquiolitis o neumonía, que pueden presentarse sin fiebre. Es fundamental, estar atentos a señales como dificultad para respirar, respiración rápida, hundimiento del pecho, pérdida de apetito y coloración azulada en labios o uñas.
- La tos siempre es signo de infección: este reflejo puede estar asociado a otros factores, por ejemplo, asma o alergias. En el caso de estas últimas, se manifiestan con tos seca, sin mucosidad, así como lagrimeo y enrojecimiento en los ojos; para lo cual se suele recetar antihistamínicos orales y corticoides intranasales a fin de frenar estos síntomas.
Finalmente, el Dr. Altamirano resaltó que es fundamental que las familias prioricen la salud de sus hijos y tomen medidas preventivas, en lugar de centrarse únicamente en que no falten a clases.
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