Carlo Acutis, el joven que el papa León XIV proclamará santo: ¿por qué se le llama ‘El patrón de Internet’?
Su vida breve, marcada por la fe y la tecnología, inspira a millones en todo el mundo.
Este domingo, el papa León XIV inscribirá en el libro de los santos a dos jóvenes italianos: Pier Giorgio Frassati y Carlo Acutis.
De este último, llamado ya por muchos “el patrón de Internet”, resalta no solo su cercanía con la tecnología, sino también un modo de vivir la fe que, pese a su brevedad, marcó profundamente a la Iglesia contemporánea.
Carlo Acutis nació en Londres en 1991, en el seno de una familia acomodada que posteriormente se trasladó a Milán. Creció rodeado de comodidades materiales, pero eligió un estilo de vida que lo llevó a dedicar su tiempo a los más necesitados.
Compartir lo propio abre caminos de fe
El sacerdote Giampiero Gambaro, vicerrector de la Universidad Católica Sedes Sapientiae, lo describió como “un testigo de que los jóvenes pueden vivir una vida noble y grande, quizás corta, pero súper intensa”.
Desde pequeño, Carlo sorprendió a su madre, Antonia Salzano, por la naturalidad con la que compartía lo que tenía.
Servir al prójimo es un acto de amor
“Era un niño obediente y extremadamente generoso, que regalaba todos sus juguetes con una sonrisa y nunca se quejaba”, relató en entrevista con AFP.
A los nueve años, el adolescente llevaba comida a las personas sin hogar en Milán, y en su adolescencia se ofrecía como voluntario en comedores sociales.
La tecnología también puede ser camino de fe
El joven también aprovechó su habilidad tecnológica para promover la fe en espacios inexplorados por la Iglesia.
Con apenas 14 años, diseñó una exposición digital sobre milagros eucarísticos que se difundió por todo el mundo. Para él, el uso de Internet era una herramienta para el bien.
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“Mostró que debemos ser dueños de estas herramientas y que pueden usarse para hacer el bien”, recordó su madre.
Acutis falleció en 2006, a los 15 años, tras una leucemia fulminante. Durante su velorio, muchas de las personas que habían recibido ayuda de él acudieron a despedirse.
Los milagros fortalecen el camino a la santidad
Su cuerpo descansa en Asís, en el Santuario del Despojo, donde un millón de peregrinos lo visitaron en el último año.
El camino hacia la santidad se consolidó con el reconocimiento de dos milagros atribuidos a su intercesión. El primero ocurrió en Brasil, en 2013, cuando un niño con una rara malformación pancreática se recuperó sin necesidad de cirugía.
Un joven inspira en medio de la era digital
El segundo, aprobado en 2024, benefició a Valeria Valverde, una estudiante costarricense que superó un grave traumatismo craneal después de que su madre depositara una carta en la tumba de Acutis en Asís.
La Iglesia reconoce en él a un “santo millennial”, un joven capaz de vivir con radical sencillez en un mundo digitalizado y saturado de distracciones.
Ser auténtico vale más que imitar al mundo
La frase que repetía con convicción sintetiza su legado: “Todos nacen originales, pero muchos mueren como fotocopias”.
Con su canonización, el Vaticano busca enviar un mensaje directo a la juventud: la santidad no está reservada a quienes cumplen gestos espectaculares, sino que también florece en lo cotidiano, en una vida entregada con alegría y autenticidad.
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