“En vez de estar marchando, la ‘Generación Z’ debería informarse por quién va a votar”, sostiene Víctor García Toma
El expresidente del Tribunal Constitucional saludó que la Municipalidad de Lima haya anunciado que presentará denuncias penales contra quienes cometieron actos vandálicos en recientes manifestaciones en el centro de la capital.
La Municipalidad de Lima ha anunciado que presentará denuncias penales contra quienes han incurrido en actos violentos durante las manifestaciones de la llamada ‘Generación Z’. Es lo que corresponde, ¿no?
Es lo que corresponde. Si bien existe la libertad de protesta, esta tiene como marco el respeto al orden público, a los bienes que pertenecen al Estado y a la propiedad privada, además del respeto a la autoridad policial, que lo único que hace es custodiar para que las marchas no se salgan de cauce. Pero, lamentablemente, hay actos de provocación. La primera marcha estuvo dirigida a protestar —con justa razón— contra el reglamento de la ley vinculada con las pensiones de las AFP, pero esto ha ido cambiando y empezaron a aparecer banderas de un anime japonés, tratando de rememorar y repetir lo que se hizo en Nepal.
—Es decir, quemar el Congreso.
Así es. Luego han aparecido grupos estudiantiles de extrema izquierda de algunas universidades públicas y también los mismos dinosaurios de siempre que se cuelan.
—Como Yonhy Lescano o López Chau.
Son los mismos huelguistas de toda la vida. Si ellos convocaran a esta marcha, no iría nadie.
—¿Cómo entender lo que piden los jóvenes de la ‘Generación Z’ y los infiltrados violentistas? ¿Cómo pueden reclamar la vacancia de Dina Boluarte y, a la vez, el cierre del Congreso? Si reclaman que Pedro Castillo salga de la cárcel, ¿acaso no deberían marchar hacia el Poder Judicial?
No hay un orden establecido. Hay una confusión. Estamos en un periodo electoral y, si estamos descontentos con el Gobierno y el Parlamento, tenemos la mejor oportunidad. En vez de estar marchando, deberían estar preocupándose por informarse sobre por quién van a votar o, en todo caso, en incorporarse a las agrupaciones políticas.
—¿Usted haría una diferenciación entre los jóvenes de la ‘Generación Z’ y los infiltrados, o cree que hay vándalos en este grupo también?
Para comenzar, la ‘Generación Z’ no tiene un conjunto de ideas generales. Son personas que tienen una visión muy personal de la vida; no conjugan con el “nosotros”, sino con el “yo”. Es una generación extremadamente personalista. Entonces, considerar que la ‘Generación Z’ está en la posibilidad de convertirse en la vanguardia de un nuevo proyecto es iluso. Sin embargo, está presente el espíritu de incordia juvenil. Pero a mí me preocupan las propuestas, que no pueden ser que regrese Castillo.
—O que se deje sin efecto la suspensión de Delia Espinoza.
Yo estoy seguro de que la mayoría de los que han marchado no sabe quién es la doctora Espinoza. Me parece que la primera protesta estuvo bien orientada ante una ley que los perjudica, pero las otras han sido actos de manipulación, porque hay muchas personas que intentan incendiar la pradera. Saben que, en abril del próximo año, no van a ganar y quieren un muerto.
—De cara a las elecciones del 2026, son 6.7 millones de peruanos de la ‘Generación Z’ que van a votar, pero, a lo sumo, marcharon 500 personas. Tampoco es que estas movilizaciones representen a la mayoría de miembros de este rango etario; es decir, jóvenes de 18 a 29 años.
El hecho de que se tenga una edad de entre 18 a 29 años no significa que todo este grupo de personas tenga un pensamiento uniforme o, por lo menos, en un mismo sentido. Se entiende que, más allá del tema cronológico, hay una postura ante la vida. Hay jóvenes que trabajan y estudian que no podemos meter en el mismo saco.
—El balance de las marchas fue 19 efectivos policiales heridos y daños materiales por más de 2 millones de soles.
No se pueden permitir los actos de violencia ni los disturbios dirigidos a afectar la propiedad pública y privada.
—Pero la narrativa que se quiere instalar es que la Policía reprime, cuando lo que hace es restablecer el orden público. ¿Usted cree que la Policía ha actuado de manera exagerada? Periodistas se han quejado de haber sido heridos con perdigones de goma.
Ha habido un acto que todos conocemos y repudiamos: el de un policía a quien se le va la mano y golpea con su vara a una persona de 70 años, quien no sé qué hacía ahí.
—Estaba provocando a la Policía.
El afectado no era de la ‘Generación Z’ y su ubicación era claramente para provocar una acción contra la Policía, pero la respuesta, en función a la edad de la persona, no fue la correcta. Sin embargo, en términos generales, la Policía tiene un manejo bastante diestro en lo que se refiere al control de estas manifestaciones. Vuelvo a insistir: bienvenidas las marchas, pero estas tienen que tener dos aspectos: la propuesta y la conducta, que no puede ser antisocial.
—Como las que ocurrieron en contra del gobierno del golpista Pedro Castillo.
Yo he participado en varias de estas y me quedé sorprendido. Incluso en las arengas, donde había bastante respeto. Fue una cosa muy cívica.
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