Policía Nacional e Interpol encarcelan a inocente por error y causa un escándalo internacional
Aldo Ávila presentó a comerciante como cabecilla de red criminal. A pesar de desmentido, lo ascienden a general.
“Nosotros nos limitamos a dar la información que nos remite Interpol”, se justificó el Aldo Ávila, miembro de la Policía Nacional que acaba de ser ascendido a general, respecto a su vergonzosa actuación contra el comerciante Eddie Manuel Núñez Santos. Este fue presentado ante la prensa como cabecilla de una red de extorsionadores a nivel internacional, lo cual era mentira.
El año pasado, una coordinación con la Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) hizo que lo llevarán al penal Castro Castro, del 2 de octubre al 9 de noviembre. Allí debía esperar su extradición, pero fue liberado porque la embajada de EEUU señaló que era inocente.
Farsa al descubierto
La cadena internacional de noticias BBC acaba de publicar un informe donde Núñez recuerda que pidió no exhibirlo como delincuente. El Tribunal Constitucional ha sentado que no se puede hacer esto si no hay una condena firme de por medio.
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“Sabía que eso me iba a hacer daño, así que le pedí al coronel Aldo Ávila, jefe de la oficina de Interpol, que no se me expusiera ante los medios (...) Me pusieron un chaleco que decía ‘detenido’ y me hicieron salir por un pasadizo. (...) Luego el coronel Aldo Ávila brindó unas declaraciones a los medios en los que distorsionó la realidad y dio por sentado que yo era culpable”, recuerda.
“La pesadilla del peruano que pasó semanas en la cárcel en su país después de que Estados Unidos lo acusara por error de pedofilia y amenazas de bomba”, titula la BBC.
En un principio, el FBI le atribuía ser “Lucas”, quien enviaba correos electrónicos con amenazas de bomba, tanto a centros educativos y religiosos como a aeropuertos y centros comerciales en los EEUU. Esto había provocado alertas y evacuaciones.
Núñez trabajaba en Informática, y se le denunció a pesar de que existía la posibilidad de que una de las cuentas de sus clientes hubiera sido hackeada.
En internet, el agraviado sigue apareciendo como un delincuente. El Departamento de Justicia norteamericano ya borró su nombre de su portal, pero siguen apareciendo las declaraciones de Ávila.
“Esperaba una comunicación de las autoridades de Estados Unidos y su silencio sobre mi caso me duele (...) Me ha quedado claro que la policía peruana es muy poco profesional, y creo que algunos de sus mandos utilizan a los medios para promocionarse”, sostuvo Núñez.
Agregó que ahora cuenta con el asesoramiento de un abogado para emprender acciones legales, porque cree que sus derechos fueron vulnerados.
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