Enrique Valderrama

Es innegable que durante gran parte de estos 18 años de retorno a la democracia –tras el lodazal fujimontesinista– ha gobernado en el Perú una suerte de neo oligarquía, que podríamos resumir acotadamente como la "constructocracia", o régimen de las grandes constructoras peruanas, las aliadas de las corruptas megafirmas brasileñas; esta coalición ha buscado controlar la política local y a sus ac

Martín Vizcarra ha demostrado en casi un año de gestión que no tiene muchas cualidades para liderar el Ejecutivo, no hay ideas para el despegue económico, en donde las expectativas de crecimiento para este año son cada vez menos alentadoras, tampoco avances en la reconstrucción del norte, cuestión dramática si tenemos en cuenta que todo indica que las lluvias vendrán sí o sí.

En septiembre del año 2013, durante un discurso en Kazajistán, el presidente de China, Xi Jinping, propuso la iniciativa “Una Franja, Una Ruta” (One Belt, One Road). Este proyecto consiste en la reconstrucción de la antigua Ruta de la Seda y la Ruta de la Seda Marítima, con el fin de integrar económica, política y culturalmente a los países que son parte de la misma.

Vizcarra anuncia que les subirá el sueldo a los alcaldes a nivel nacional. Supongamos que cumpla su palabra esta vez. Imaginemos que les suba únicamente un promedio de 2 mil soles a cada uno de los 1,800 alcaldes, esto nos daría unos 3 millones 600 mil soles al mes. En un año, por la sola ocurrencia del Presidente, el Estado peruano despilfarraría casi 50 millones de soles.

El procurador del Estado suscribió el preacuerdo con Odebrecht, se dice que sin tener las facultades para hacerlo y sin haber tenido tiempo suficiente para revisarlo, por tanto debemos entender que debió recibir la sugerencia o instrucción del ministro de Justicia y/o del Presidente de la República para estampar su firma en tamaño despropósito que negoció el fiscal José Domingo Pérez.

La historia ha demostrado que aquellos que levantaron airadas banderas de lucha contra la corrupción resultaron los más grandes pillos.

A partir de 2001, en los años siguientes el anterior Ministerio de Cultura de la República Popular China empezó a crear las actividades “Marca Año Nuevo Chino” en las ciudades principales de los países extranjeros durante el período de año nuevo chino.

Bien decía Marx: “la historia se repite dos veces, primero como tragedia y luego como farsa”. Es claro que la receta que está siguiendo Martín Vizcarra es un calco de las maniobras construidas por Fujimori y Montesinos en la década de los 90. El objetivo sería lograr una continuidad en el poder del Presidente accesitario más allá del 28 de julio de 2021.