3 pasos claves para elegir un financiamiento

En nuestro día a día nos encontramos con situaciones donde nuestra liquidez (disponibilidad de efectivo) es menor a lo que requerimos para una u otra adquisición puntual. Es muy importante, antes de hablar de cómo evaluar un financiamiento, que tengamos como regla clara que uno NUNCA DEBE FINANCIARSE para gastos NO VITALES (en realidad nunca deberías financiarte para gastar, solo para invertir, pero muchos a veces requerimos hacer pagos de cosas vitales y no nos alcanza la liquidez), aquí entra a tallar mucho el manejo de prioridades de cada uno; saber que las zapatillas que nos encantan, el carro que nos quita el sueño, el viaje que le prometimos a la pareja, NO SON GASTOS VITALES, por ende unos los hace con sus excedentes.
Dicho esto, y asumiendo que todos estamos alineados en que solo debemos financiarnos bajo 2 circunstancias: un gasto vital (emergencias médicas por ejemplo) o una inversión; pasamos a explicar los 3 pasos claves a seguir antes de tomar una inversión.
El primer paso a realizar es definir EL MONTO A FINANCIARNOS: Este paso es fundamental, ya que muchas veces tenemos una parte del monto total y no sabemos cuánto realmente financiarnos. Para esto, debemos saber que un financiamiento debe SOLUCIONAR una situación y no generarnos PROBLEMAS FUTUROS, por ende, la cantidad a financiarnos debe ser tal que nos permita resolver la necesidad y dejarnos con liquidez para afrontar los gastos siguientes hasta nuestro próximo ingreso de dinero, es un grave error el pensar que “mientras menor sea el monto, mejor”, depende siempre de cuánto te afecta la liquidez en ese momento.

Una vez evaluado el monto a financiar, el segundo paso clave es LA DETERMINACIÓN DE LAS CONDICIONES DEL FINANCIAMIENTO (interés, tiempo y forma de pago): Muchos a veces empujados por la ansiedad de cubrir la necesidad a financiar, tomamos un préstamo y pasamos por agua tibia las condiciones… y cuando menos lo pensamos, estamos sumergidos en una bola de nieve sin salida. Entendamos algo, todas las condiciones SON NEGOCIABLES, además, se puede lograr un periodo de gracia (tiempo sin pagar) e inclusive una extensión del plazo en caso nuestro flujo de ingresos se vea comprometido por el pago mensual a hacer. Es determinante saber que el pago mensual NO DEBE COMPROMETER nuestros gastos vitales, aquí una fórmula sugerida:[ INGRESO TOTAL – GASTOS VITALES ] * 0.3 = PAGO MÁXIMO EN CUOTAS DE FINANCIACIÓN. Esto quiere decir que en pago de financiamiento no debemos pagar más del 30% de nuestro excedente vital mensual.

Finalmente, con esto claro, el tercer paso está en ELEGIR UN BUEN FINANCIADOR, aquella persona o institución que NO nos ahogará en caso de cualquier contingencia.
No nos tomemos a la ligera el financiarnos, es algo que debe ayudarnos a superar un problema o a crecer, nunca debe ser un verdugo anunciado.
Buena semana para todos.

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