¿Afectará la reciente sentencia civil a Trump?
La estrategia demócrata para liquidar políticamente al expresidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, ha fracasado. En efecto, el plan que sus detractores estaban buscando era que la justicia lo declare culpable penalmente del cargo de violación sexual contra la experiodista E. Jean Carroll y eso no ha sucedido. Se trata de una decisión judicial de naturaleza civil que lo responsabiliza de agresión sexual, que es distinto.
Aunque ambos cargos son completamente censurables en términos jurídicos y sobre todo políticos, el reciente fallo tiene carácter reparador, por lo que Trump deberá pagar 5 millones de dólares estricto sensu por abuso y difamación, y dado que no es punitivo, es decir, no tiene naturaleza penal, el exmandatario no será encarcelado como era la pretensión febril que estaban buscando sus rivales.
Es verdad que Trump va a apelar la sentencia, pero también lo es que no doblegará a sus aspiraciones reeleccionistas. Distinto hubiera sido el caso de que fuera declarado culpable del delito de violación sexual. Hubiera remecido a la vida política estadounidense convirtiéndolo como el primer presidente de su historia condenado a la pena privativa de la libertad y desde luego al propio Trump lo hubiera devastado por más magnate que lo sea, pero eso no ha sucedido.
Como en política se producen muchas cosas dialécticamente y también por el denominado efecto dominó, así como por los inesperados trampolines por los que un día los políticos están de cabeza y al otro nuevamente de pie, pareciera que Trump, que apenas conocido el veredicto del jurado lo calificó de “una completa vergüenza”, le sacará partido a la exposición mediática que sus propios opositores han terminado produciendo casi como disparándose a los pies.
Recordemos que Trump se hallaba tranquilo en sus cuarteles de invierno mientras transcurrían los dos primeros años del gobierno del demócrata Joe Biden, y de pronto comenzó a tener otra vez notoriedad apenas se conoció del proceso penal que sus rivales impulsaron judicialmente contra él en la idea de inhabilitarlo para las elecciones de 2024. Trump es el candidato natural del partido republicano. Su condición de expresidente pesará a la hora de iniciarse la campaña electoral.
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