Allanamiento abusivo

En un hecho sin precedentes el Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción en el Poder (Eficoop) del Ministerio Público realizó el allanamiento a la casa del periodista Juan Carlos Tafur, en el marco del operativo “Valkiria XI”, donde se encuentra involucrada la suspendida fiscal de la nación Patricia Benavides.
Tafur con justa razón calificó el hecho como “Un abuso y una persecución fiscal”, ya que las autoridades incautaron celulares, además de laptops que le pertenecían a su esposa, trabajadores y chofer, agregando que “Violan el derecho a la libertad de prensa, primero a la reserva de las fuentes y segundo, a publicar información veraz, porque nada de lo que he publicado es mentira. Sin embargo, se producen estos hechos de abuso fiscal”.
Según Tafur, en entrevista a una radioemisora sostuvo que “Me atribuyen fuentes que no voy a mentir ni desmentir porque es parte de mi derecho a conservarlas como si fueran las fuentes de la información que yo propale en los informes”, asegurando que se reafirma en todo lo publicado en el portal digital, ya que toda la información estaría “absolutamente verificada” y que este accionar por parte del Eficoop se trataría de una “venganza” de la fiscal a cargo del equipo.

“Ninguna de las publicaciones sobre temas fiscales han merecido ni siquiera cartas rectificatorias y mucho menos juicios por difamación. Yo creo que esta es una venganza de Marita Barreto, de quien depende el equipo que se ha apersonado a mi casa por haber publicado ese informe de Sada Goray y lo recondujo por los caminos penales donde hoy se encuentra”, señaló.
Tras informar el allanamiento a la casa de Tafur, Augusto Thorndike afirmó “Nosotros, en este noticiero, hemos criticado algunas de las gestiones de Marita Barreto y aquí nos persigue. Hay una denuncia delirante en contra de dos de nuestros reporteros, Karina Aliaga y Johann Klug, por hacerle un supuesto reglaje a Marita Barreto. Dos periodistas identificados como miembros de este canal”, agregando “Cuántas veces los reporteros van a buscar a funcionarios públicos que se deben a la opinión pública para dar explicaciones sobre casos delicados. No hemos estado haciendo ningún reglaje, nos hemos identificado plenamente como periodistas y Marita Barreto nos ha denunciado por reglaje”.

Carlos Paredes, director de Contracorriente, afirmó : “Estamos en la cumbre de la politización de todo el sistema de administración de justicia; no solo la Fiscalía, que ha quedado claro que ya es una cacería de brujas y demás”.
Milagros Leiva sentenció: “La Fiscalía no puede pedirle cuentas a un periodista de sus fuentes y tampoco podría actuar, como dice Tafur, en venganza porque simplemente escribió un artículo que dejaba mal parada a Marita Barreto”.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención Americana de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Constitución Política del Perú, el Código de Procedimientos Penales, el Código Procesal Civil, la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión, la Declaración de Chapultepec, los Principios de Lima 2000 y la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, nos ampara la facultad de no revelar nuestras fuentes.
En conclusión, el secreto profesional periodístico es el reconocimiento del Derecho del periodista a no revelar la información, o la manera en que ha sido conseguida, sin embargo, el Ministerio Público pretende desconocer estos preceptos, inclusive a través de un comunicado insulso.

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