AMLO: persona no grata

Andrés Manuel López Obrador, AMLO, es un sujeto repudiable. Dicho sea de paso, interpreta muy bien su condición de semi reblandecido, para inmiscuirse -en este caso- como virrey de nuestra patria, en defensa de un reo imputado por corrupto, violador de nuestra Constitución, quebrantador de nuestra paz social e instigador de violentas asonadas, Uno que, como señala Fiscalía de la Nación peruana, resulta ser el líder de una organización criminal que gobernó el Perú hasta el 7 de diciembre último. ¡Consecuentemente, AMLO debe ser declarado persona no grata al Perú! Porque este mandatario de México ha violado el derecho internacional al asilo político, dándoselo a criminales comunes perseguidos por la Justicia peruana. En este caso, hablamos de la esposa de Castillo, imputada por el Ministerio Público como la coordinadora de la citada organización criminal, instalada en el Palacio de Gobierno del Perú. Y de su hermana/hija, llamada Yenifer, integrante de la mencionada organización criminal, entre muchos otros cargos de alto calibre. ¡Esta laya de delincuentes no califica para recibir asilo político! En este sentido, AMLO ha decidido concederle asilo político a una pandilla de delincuentes comunes peruanos, por meras simpatías y complicidades políticas e ideológicas. AMLO es un declarado comunista. ¡Y esa organización criminal que gobernó nuestro país hasta el pasado 7 de este mes también está integrada por comunistas del más extremo calibre! ¡Son aquellos herederos del genocida Abimael Guzmán, presuntamente dirigidos por Pedro Castillo según la imputación que formula nuestro Ministerio Público! Y asilar a criminales, amable lector, está terminantemente proscrito por los códigos internacionales de Justicia. Porque amparar a reos comunes implica facilitar la fuga a gente que debe pagar sus crímenes en las cárceles del país afectado. AMLO se ampara en aquello que se conoce como una “vieja tradición mexicana del asilo político”. Doctrina que empezó en 1853 cuando, junto a Colombia, México suscribió un tratado de no extradición por delitos politicos. Sin embargo repetimos, ni Castillo ni sus familiares –ni tampoco los secuaces que le han acompañado en su infernal gesta politica para meter al Perú a la órbita comunista sudaca- califican de políticos. ¡Son solo delincuentes terroristas! Acá y en cualquier lugar del orbe. Reiteramos. ¡Nunca fueron políticos ni tampoco lo serán! ¡Son criminales en serie, amparados en un espurio titulo de “politicos al servicio del pueblo”! Pero AMLO no solo les ha extendido una oferta de asilo a los integrantes de esa banda criminal -que le ha robado muchísimos millones de soles al sufrido pueblo peruano. AMLO también se ha entrometido, de manera grosera, visible, reprochable, en asuntos de exclusiva incumbencia de los peruanos, descalificando la coyuntura actual del Perú tal como verdaderamente es: una semi guerra civil organizada por Castillo y la mafia comunista de mercenarios –incluida su familia- que gobernó el Perú dieciocho aciagos meses, arruinándoles la vida y salud a 32 millones de peruanos. AMLO es un héroe vivo para esa escoria pro terrorista descendiente del genocida movimiento terrorista sendero luminoso, que atacara sanguinariamente el Perú durante un cuarto de siglo.

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