¡Basta de liberar delincuentes!
Hace algunas semanas, el presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo, reconoció la existencia de malos magistrados, quienes bajo el perverso argumento de “la autonomía” están dejando en libertad a hampones de manera irregular. Opinión que comparto plenamente y que me ha llevado a trabajar en la presentación de un nuevo proyecto de ley que sancione precisamente a magistrados –sean estos jueces o fiscales– que liberen a delincuentes capturados en flagrancia.
No es posible que sigan existiendo casos como el de los 13 extorsionadores extranjeros que fueron capturados en Cañete operando bajo la modalidad de ‘gota a gota’ y que fueron luego impunemente liberados, despreciándose así, además, el trabajo de valerosos policías, quienes, muchas veces arriesgando sus vidas, los capturan. Lo he dicho y lo reafirmo: Esos cómplices del crimen que fungen de magistrados deberían irse presos también. No puede haber contemplaciones con magistrados garantistas que anteponen los ¨derechos humanos¨ del delincuente antes que los derechos humanos de la comunidad y del Estado en su conjunto.
Por estas razones, el proyecto de ley que preparo busca modificar el Código Penal para que los jueces y fiscales que suelten ilegalmente a los delincuentes sean arrestados tras cometer este ilícito. Considero que situaciones excepcionales, ameritan decisiones excepcionales; basta de malos magistrados que manchan el honor del Poder Judicial, que administra justicia a nombre de la nación. Si un juez o fiscal libera delincuentes capturados en flagrancia, innegablemente debe ir preso.
Debemos acostumbrarnos a ser implacables con la corrupción ya sea para erradicar a malos funcionarios o para impedir que estos ejerzan cargos públicos y cuanto más, políticos. En ese sentido también soy autor de una propuesta legislativa que busca modificar la Constitución con la finalidad de impedir que sentenciados por los delitos de terrorismo, contra la seguridad nacional, traición a la patria, puedan postular a cargos de elección popular. Nos corresponde como ciudadanos salvaguardar nuestra democracia, nuestra seguridad, y un adecuado orden social. ¡Así que no lo podemos permitir!
Retomando el tema del inicio, yo espero que esta nueva iniciativa de prescindir de malos magistrados que son una amenaza para nuestra seguridad, goce de respaldo multipartidario en el Congreso, ya que es un eslabón del sistema que necesitamos corregir. ¡Basta de liberar delincuentes!
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