Buenos días, don Hernando, lo saluda un emprendedor

Buenos días, señor Hernando de Soto, asumiendo que llegue a leer estas palabras, quería tomarme el tiempo de poner por escrito aquello que viene quitándome el sueño desde hace dos semanas, y es que realmente creo que tiene usted gran responsabilidad en este enfermizo e inevitable insomnio.
Primero, déjeme decirle que siempre lo he admirado, desde chico, siempre escuchaba atento cuando en cualquier medio de radio o televisión local, aquellos que hoy corren el riesgo de ser vulnerados, controlados y hasta expropiados por el futuro presidente (uno lo deja claro en su plan y el otro tiene antecedentes), hablaban de sus exitosas negociaciones entre gobiernos y protestantes, a veces hasta logrando mediar con éxito en situaciones que impactaban en la economía mundial, y así diferentes episodios que hicieron que sin tener capa o súper poderes, lo viera como un súper héroe.
Ahora, déjeme contarle un poco de mí; yo cumplo 33 años hoy miércoles 28 de abril, esto quiere decir que viví en brazos de mi madre unos cuantos apagones donde recuerdo vagamente escucharla decir “seguro ya derrumbaron una torre”, quiere decir también que mi infancia fue en los 90, donde mi padre, con muchísimo esfuerzo, logró hacerse un espacio en el mundo de las telas, así como otros miles de peruanos que, viniendo del campo, se convirtieron en el tiempo en empresarios exitosos. Mis padres me pudieron dar una educación decente, dentro de sus posibilidades escogieron dónde estudiaríamos mi hermana y yo. Recuerdo mucho mi infancia, don Hernando, por hechos muy marcados; pude escuchar dos veces distintas que DERROTAMOS AL TERRORISMO, al capturar a Abimael Guzmán y cuando se recuperó el control y se rescató a los rehenes de la embajada de Japón, hechos que debe recordar muy bien.
Ahora, no le voy a mentir, no todo fue maravilloso durante mis 12 primeros años de vida. Mi padre perdió mucho con un tal Manrique en CLAE, de allí nuevamente logró levantarse porque el negocio así se lo permitió, el año 98 también hubo una crisis económica muy fuerte, pero algo que me quedó grabado fue que siempre nos decía “sin terrorismo y comunismo siempre podremos volver a levantarnos” y es que lo que él vivió décadas pasadas con la estatización de la banca, el no pago de deuda externa y obviamente la incertidumbre y temores propios del terrorismo, lo marcaron.
Yo voté por RLA, pero debo confesarle que también pensé en votar por usted; voté por Rafael porque creí que su propuesta era un poco más clara y ejecutiva; ahora, le confieso que cuando me enteré de una posible alianza entre ustedes en 1ra vuelta me emocioné mucho, pero luego supe que usted no quiso y mi decepción fue mayor... EL MAYOR EXPONENTE DE LAS CONCERTACIONES MUNDIALES, NO CONCERTÓ EN PRO DE NUESTRO PAÍS... sí me decepcionó, don Hernando.
La suerte está echada, hoy existen riesgos reales de revivir la pesadilla de mi padre, quien aún viene esquivando al covid, le pido encarecidamente que vuelva a ponerse esa capa y hacer gala de sus súper poderes que me hicieron admirarlo, QUIERO TAMBIÉN TENER LA LIBERTAD DE ELEGIR LA EDUCACIÓN DE MIS HIJOS, ELEGIR SUS ALIMENTOS, PODER DARLES OPORTUNIDADES CON MI ESFUERZO... y así otras cosas propias de un país SIN TERRORISMO NI COMUNISMO. Usted sabe qué hacer para colaborar en esta carrera, no nos vuelva a defraudar.
Atentamente, UN EMPRENDEDOR, HIJO DE OTRO EMPRENDEDOR, HIJO DE UN PROFESOR DE ESCUELITA PÚBLICA DE CAJAMARCA... así de irónica es la vida.

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