China nos impone su voluntad
Cuando China detalla las ventajas de sus inversiones en distintos países, el argumento que repite más reiteradamente es que ellos no interfieren en los asuntos internos de los países en que invierte . Pero nuestra experiencia nos enseña que eso no es cierto.
Recordaremos que el año pasado el MTC Pérez Reyes señaló los 6 proyectos ferrocarrileros, que eran los priorizados en nuestro país. Sin embargo allí no figuraba el Tren Bioceánico (TB), el que conectaría Chancay con Brasil. E inclusive señaló, en más de dos ocasiones :“No creemos que debemos financiarlo (el TB). Si algún interés tiene Brasil o China en esto, ellos deberían encargarse de ello”, señaló el ministro.
Y luego de visitar China Pérez Reyes reiteró que la construcción del TB tendría que venir de Brasil y China, porque el Perú ya tiene definida su conectividad con Asia.
Lo anterior fue en respuesta a que anteriormente Cosco Perú (Chancay) había informado que la conexión desde Brasil sería a través de Cruzeiro do Sul, la frontera peruana, hasta llegar a Pucallpa, y de ahí hasta Chancay.
Posteriormente , en un giro de 180 grados que se explicaría por presiones de China, el MTC Pérez Reyes, al referirse al tren que nos conectaría con Brasil manifestó “La inversión (del tramo de Pucallpa a la frontera con el estado de Acre, Brasil) la tendríamos que hacer nosotros.
Pero China no solo habría hecho cambiar de opinión a Perú sino también a Brasil. Ya que Pérez Reyes manifestó que el TB vía Pucallpa tampoco era una prioridad para Brasil. Ya que la ruta para llegar desde Pucallpa a nuestra frontera , así como el tramo Cruzeiro do Sul y luego a Rio Branco es muy pantanoso. Inclusive hay carreteras que no se pueden utilizar los 12 meses del año por las intensas lluvias y porque permanecen bajo agua varios meses anualmente . Resultando más viable y menos costosa la ruta por la Interoceánica Sur. Lo que estaría sucediendo es que a China, por un capricho geopolítico, no le debe de atraer esta alternativa porque dicha ruta termina muy cerca del futuro puerto de Corío, que podría ser financiado por inversionistas de EE UU.
Posteriormente el MTC informa que vamos a desarrollar el TB, el Ferrocarril Chancay-Pucallpa (el que no estaba priorizado). Informando que el referido proyecto requeriría una inversión que superaría los USD 14.000 millones, es decir más del doble de la inversión del elefante blanco de la NRT. Y a dicha cifra habría que sumarle el monto de la inversión del tramo Pucallpa- frontera con Brasil, el tramo más difícil. En otras palabras , es tal el poder de China que hace que el Perú cambie radicalmente de opinión sobre el financiamiento del TB , modifique la priorización de proyectos ferrocarrileros anunciada públicamente y hace que Perú adopte una ruta muy inconveniente. Y como Brasil va a financiar su parte, China haría el negocio del siglo, ya que invirtiendo solo $ 1,400 millones en Chancay, lograría que, para su beneficio, el gobierno peruano se comprometa en un proyecto de más de US $ 14,000 millones!!, el más grande proyecto de inversión pública de nuestra historia. Por lo que a pesar que todavía ni siquiera opera al 100% el elefante blanco de la Nueva Refinería de Talara (NRT), ya el gobierno de Boluarte nos quiere embarcar en otro nuevo desastre ,mucho más grande.
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