Ciudades con legado y futuro

La ciudad de Santa Marta, en Colombia, fue el escenario para la realización de la Conferencia Iberoamérica 500+ “Ciudades con un legado para el futuro”, organizada por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) y la Municipalidad de la ciudad caribeña, que celebra los 500 años de su fundación española.
En Iberoamérica, como es el caso de Lima, nuestra capital, las ciudades son testigos vivos del encuentro cultural de dos mundos, dos civilizaciones ricas y potentes que dieron lugar a nuestra identidad actual de pueblos mestizos, herederos de esa diversidad que se aprecia en nuestras calles, plazas, edificios, iglesias y conventos; como también en nuestras costumbres, gastronomía, tradiciones y folclore.
La CAF reunió en Santa Marta a los alcaldes de las distintas capitales y ciudades de fundación española con raíces indígenas, a fin de ayudar a preservar el aporte de estos pueblos y las huellas que nos dejaron para las presentes y futuras generaciones. Muchas de estas han cumplido ya 500 años de fundación y otras están por hacerlo en los próximos años.
Con la presencia de delegaciones indígenas, especialmente de las Antillas, como el pueblo arahuaco, en esta Conferencia se apostó por superar la leyenda negra y los mitos más arraigados sobre el encuentro histórico de los dos mundos, cuya complejidad va mucho más allá de aquello que se quiere mirar como si fuera una colonización a la manera inglesa o francesa.
El descubrimiento de América, liderado por una gran mujer como lo fue Isabel la Católica, siempre consideró al Nuevo Mundo como parte de una misma realidad: nuevos territorios a los que llevar los avances de la cultura y civilización occidental, respetando y mezclándose con los pueblos indígenas. Con Carlos V, los virreinatos —primero los del Perú y México, y después los demás— fueron las provincias de ultramar a quienes se debía legar instituciones tan importantes como la universidad.
La rica reflexión que se llevó a cabo en Santa Marta fue una invitación a la revalorización de nuestra memoria histórica y sus huellas en el presente para honrar el pasado e inspirar el futuro, basada en las raíces comunes que nos permiten comunicarnos en una misma lengua a lo largo y ancho de Iberoamérica, conviviendo en ciudades con cinco siglos de historia.
La institución “ciudad” fue una manera de ordenar la vida y convivencia de las personas que, si bien no es originaria de España —porque fue un diseño importado de Roma—, los hispánicos la vigorizaron y pusieron en marcha en la península y los territorios de ultramar, principalmente bajo la batuta de Felipe II, cabeza del reino donde “nunca se ponía el sol”.
Nuestras ciudades, que se diseñaron alrededor de una Plaza Mayor donde se alza la Catedral, el Palacio Episcopal, el Palacio de Gobierno, el Ayuntamiento y las casonas principales, no olvidan el legado de nuestros orígenes más remotos como asentamientos de importantes civilizaciones. Lima es una muestra de ello, con importantes huacas ahora puestas en valor, y descubrimientos más recientes como Caral, con más de cinco mil años de antigüedad.
En la Conferencia, los alcaldes y sus representantes pudieron interactuar con organismos de cooperación, sector privado, líderes indígenas y diversos investigadores, para preservar ciudades con un futuro compartido a través del financiamiento de planes y programas concretos de recuperación. Los gobiernos locales cumplen un rol fundamental en la planificación de las ciudades.
Asistimos a nombre de la Municipalidad de Lima para exponer sobre los avances en la recuperación del Centro Histórico de nuestra capital.

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