¿Cómo nos relacionamos?
Cuantas veces iniciamos una conversación en el trabajo, en nuestra vida personal, al conocer a alguien que nos gusta, teniendo un diálogo interno, con muchos miedos, creencias, algunas veces perdiéndonos en ellos, dejando de lado el Ser auténticos, atados al pasado o del qué dirán, generándonos ansiedad. ¿Alguien se ha preguntado alguna vez en la vida por qué es tan complejo relacionarnos con otras personas? Una de las problemáticas podría derivar en no saber quiénes somos nosotros mismos, en este viaje interno de conocer lo que confrontamos en el día a día, una alternativa para comprendernos y liberarnos cuando nos suceda, es Mindfulness, esta metodología nos va a ayudar a cambiar o definir la visión de quienes somos, provocando que el individuo comprenda sus pensamientos y las emociones destructivas, favoreciendo la autoobservación de los miedos que surjan en ese diálogo interno crítico o la frustración por sentirnos rechazados, el punto mismo es cómo hacer los cambios cuando nos bloqueamos por ellos.
Con técnicas de atención plena se produce una armonización interior que se relacionaría directamente con la empatía auténtica generada en las relaciones interpersonales, no la irreal derivada de ponerse en “el lugar del otro” donde se actúa como un espejo y centrándose en experiencias pasadas fundiéndose con el otro. Es decir, a través de la conciencia plena, no se funden las perspectivas, sino que favorecerá un yo observador frente al yo experimentador. Un yo observador, definido como aquel que no juzga, acepta, tiene curiosidad del otro. Es decir, estar con los demás en sus alegrías y penas pero reales. La atención plena puede favorecer las relaciones sanas entre individuos a través de una serie de mecanismos, como la empatía incrementada, el equilibrio emocional, la flexibilidad de respuestas y una predisposición mental a la aproximación.
A su vez, comprendernos desde otra perspectiva nuestra vida, dándonos otro tipo de interrelación con los demás. En esta apertura con nuestra identidad y los recuerdos que acarreamos dentro, con la práctica de observación a lo que nos sucede, la comprendemos y nos conectamos desde lo que percibimos del mundo real. Es decir, la identidad del individuo estará formada por unos patrones experienciales del pasado. Por esta razón, no es de extrañar que las personas postergadas por los padres o en sus anteriores relaciones tengan una imagen inferior de sí mismas que influya en sus relaciones o de duda de que volverá a pasar el mismo suceso anterior.
La autobservación propia de emociones destructivas nos hace más resistente a experimentar experiencias desagradables, mejorando la intolerancia a la incomodidad que pudiera producirse durante las relaciones.
Necesitamos soltar los miedos y los recuerdos de malestar, que se afronta en nuestro interior ante una nueva relación. Si piensas que necesitas ayuda para encontrarlo, búscame como Zu Ghersi. Instagram ? https://www.instagram.com/zughersi/. Programas de reducción del estrés y de inteligencia emocional con Mindfulness.
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