Competitividad y Promoción de las Exportaciones
Leía un trabajo de CEPAL sobre las políticas de promoción de las exportaciones de Chile que tiene como título “de las políticas de subsidio a las exportaciones, a las políticas de desarrollo de la competitividad”. Una frase que sintetiza el reto que enfrenta un país que abre su economía de manera profunda para integrarse al mundo y que entiende que en este nuevo escenario abierto y globalizado la competitividad es un principal fundamento para el éxito económico.
El documento empieza diciendo en su primer párrafo que “un sistema de políticas de exportaciones que entrega apoyo efectivo a las empresas juega un papel clave para el crecimiento de las exportaciones”, subrayando que este instrumento compensa el costo de los obstáculos que enfrenta el exportador.
La segunda frase, que completa el mensaje del título, es que “por muy eficiente que sea un sistema de promoción de exportaciones puede ser que sea insuficiente para compensar los obstáculos que encarecen las exportaciones… el “costo-país”.
Las dos ecuaciones quedan claramente definidas: por un lado, las entidades públicas y privadas vinculadas al comercio exterior deben trabajar juntas para tener un sistema de promoción de las exportaciones eficiente. Por otro lado, debemos tener una red institucional debidamente articulada que aborde la difícil tarea de reducir el llamado “costo-país”.
Hablamos de una red institucional, en primer lugar, porque necesitamos del esfuerzo participativo de todas las instituciones. No vamos a llegar lejos en la mejora de la competitividad si hay intereses opuestos, indiferencia o falta de compromiso.
En segundo lugar, el “costo-país” es generado por problemas administrativo-burocráticos, por la falta de buenas prácticas competitivas y por problemas estructurales como las brechas de infraestructura, educación, tecnología y servicios públicos. Por lo tanto, se requiere de la participación de entidades transversales (MEF, MPTPE, MTC, Minedu, entre otros) como de entidades sectoriales (los ministerios de la producción), así como entidades regionales y locales.
El Perú tiene un enorme potencial exportador; es más, la principal vía para el crecimiento y desarrollo económico del país es la exportación. Desactivar o recortar un sistema de promoción de exportaciones es el camino más sencillo políticamente, pero será el más costoso económicamente si no se diseña un tránsito coordinado y firme hacia la competitividad.
Reformar la estructura institucional de la economía del país es el camino que debemos seguir, y para andar en esa ruta son necesarias la misma voluntad política que el Presidente ha mostrado en las reformas jurídica y política, así como también el esfuerzo y decisión que muestra el alcalde de La Victoria para ordenar su distrito. A ello tenemos que sumarle el esfuerzo empresarial que se compromete a plantear un modelo empresarial comprometido con los objetivos de desarrollo del país.
(*) Presidente de Adex
