Con nuevos gabinetes ministeriales, ¿solucionarán los problemas nacionales?
El jueves 28/04/2022 el presidente Pedro Castillo cumplirá 9 meses de su “elección presidencial” como candidato de izquierda, lapso en que va camino a un quinto gabinete ministerial y envuelto en movilizaciones de protestas por falta de solución a severos problemas nacionales y la falta de empleo para cientos de miles, incremento de la pobreza extrema, carestía de los productos alimentarios de primera necesidad, precariedad en los servicios prestados por entidades públicas, falta de oportuna administración de justicia, aumento de la delincuencia, deficiencia en los servicios de salud, educación, etc.
Ello en medio de contradicciones políticas entre el Ejecutivo y el Legislativo evidenciando la senilidad de los viejos partidos y la aparición de nuevos (aventureros) con “fines electorales”. Existe una permanente confrontación entre pedidos de vacancia presidencial (o su renuncia) y disolución del Congreso y ahora hasta piden nuevas elecciones generales.
El profesor Castillo probablemente fue un “excelente” dirigente sindical, pero carece de cultura política, de estudio del mundo económico para la administración del país; evidencia la falta de experiencia en el manejo de la administración pública ignorando que los mecanismos del Estado ya estaban manejados por “los otros” que venció electoralmente. Ha incurrido en error para designar ministros y altos funcionarios y falta de visión para escoger profesionales con capacidad para administrar los sectores del Estado. Debió conocer la forma de identificar a los enemigos y a los incapaces y efectuar acciones para combatir la corrupción tanto de los “gobernantes y funcionarios” que ya están procesados, así como el tener la suficiente perspicacia para impedir corruptos en su gobierno.
Reiteradamente se han hecho públicas opiniones para que el actual Gobierno adopte acciones políticas efectivas para la honesta captación de empresarios nacionales y extranjeros para que inviertan en minería, constituyan modernas fábricas para elaborar productos con valor agregado, incentivar la producción agrícola. Lamentablemente nuestro “gobernante” no escucha. La exportación de los productos nacionales permitirá garantizar la existencia de puestos de trabajo permanentes con racionales remuneraciones, con lo que se pueda combatir la pobreza y consolidar la economía del país para invertir en la infraestructura a nivel nacional con lo que el Estado actuará como inversionista y generador de empleo; también para la eficiencia en los servicios públicos de la educación, salud, transportes e incluso formalizar a los pequeños fabricantes y comerciantes. Además, habrá fondos para combatir la delincuencia.
Ya se comenta la caída del actual presidente del Consejo de Ministros que implicará un nuevo gabinete ministerial. ¿Con eso enmendará el camino a la desgracia nacional?
