¿Cryptos o tierra? Volatilidad o sostenibilidad
Cuando evaluamos la decisión sobre qué caminos podemos seguir para construir nuestra economía, encontramos una serie de alternativas con escenarios muy prometedores, tanto así que nos hacen mirar con desprecio otros caminos “menos rentables”. Toda posibilidad de inversión vale según el contexto en donde se dé, y cuando hablamos de contexto, básicamente es una foto instantánea del estado en el que se encuentran las variables de decisión para dicha inversión; por ejemplo, si nos ofrecen un departamento de cien metros cuadrados frente al malecón de Miraflores a ciento cincuenta mil dólares, a primera vista suena como una espectacular oportunidad (el metro cuadrado en dicha zona fluctúa entre los $2,700.00 y $3,200.00), pero es justo allí donde debemos actualizar el contexto; ¿qué sucede si el departamento tiene inquilinos precarios dentro? ¿Qué pasa si el edificio donde se encuentra el departamento tiene problemas de filtraciones? ¿O si uno de los propietarios tiene actitudes que afectan la vida diaria? ¿Aún lo vemos como una excelente oportunidad? Probablemente sí, o probablemente no, lo importante es que debemos tener el contexto COMPLETO antes de definir dicha decisión; además, eso es con relación a la inversión planteada en sí, pero algo que debemos considerar también es el COSTO DE OPORTUNIDAD, que no es más que todo aquello a lo que renunciamos al tomar una decisión concreta.
Cuando evaluamos qué camino tomar con relación a desarrollar nuestra economía, no debemos mirar sólo la rentabilidad numérica que nos ofrece una opción de inversión versus otra, es fundamental evaluar los riesgos que esta implica, la periodicidad que tiene, cuánto tiempo existe en el mercado, y así, otras variables que aplicarán según la oportunidad que evaluemos; ya hace unos años vemos cómo en diferentes partes del mundo nacen nuevos millonarios de la noche a la mañana por colocar dinero (disculpen si no lo llamo invertir) en cryptomonedas, que un día valían 0.1 centavos y al mes valían dos mil dólares... Sí, son casos reales, pero señores, entendamos que eso es lo que son... CASOS, y además, si hay algo fundamental en el camino a elegir, es justamente la generación de HÁBITOS SOSTENIBLES de generación de dinero.
Entendamos lo siguiente, si encontramos una opción VOLÁTIL de inversión, tomémoslo como OPORTUNIDAD, una vez logrado, construyamos el CAMINO de SOSTENIBILIDAD. Lo que tiene valor TANGIBLE (proyectos de bienes raíces, industrias productivas, etc) siempre será un medio de crecimiento sólido, lo ha sido por generaciones. Veamos con entusiasmo los negocios, pero siempre con atención al contexto que rodea la rentabilidad ofrecida. Buena semana para todos.
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