De estupidez en acción a convulsión por imbecilidad
Una de las definiciones del Perú más conocida de Manuel González Prada es: «PERÚ: PAÍS DE SUPLICIOS Y ESTUPIDEZ EN ACCIÓN». (1848-1918 : Páginas Libres «Horas de Lucha»).
Si resucitara, ahora la definición sería: «PERÚ : PAÍS DE SUPLICIOS Y CONVULSIÓN POR IMBECILIDAD».
Estupidez es falla o torpeza en el raciocinio e imbecilidad es torpeza por falla orgánica referida al entendimiento y/o relajo moral; un retardado o un cínico.
En este momento, el Perú politicamente está archiconvulsionado por esta vacancia basada esencialmente en la imbecilidad de considerar una OPINIÓN del Presidente como una acción; es decir un delito.
Hacer estas disquisiciones entre «estupidez» e «imbecilidad» y entre «acción» y «convulsión», es requisito para poder entender la alta política que está acaeciendo en los actuales momentos del Perú:
1.- Que están ocupados a dedicación exclusiva, la oposición por vacar al Presidente y el Presidente por disolver al Congreso, ambos legítimos de origen.
2.- Que el Presidente Castillo en sus 7 meses siga obsecado en la Asamblea Constituyente como sinónimo de solución de los problemas del país, es fetichismo en la Constitución.
3.- En entrevista a CNN, el Presidente dijo: «Consultaré a la población una salida al mar de Bolivia por territorio peruano». Este ofrecimiento ha sido considerado delito de traición a la Patria por 6 de los más destacados políticos de la derecha peruana: Francisco Tudela, Ángel Delgado, Lourdes Flores, Hugo Guerra, César Vignolo y Fernán Altuve. En el colmo, la subcomisión pertinente del Congreso acaba de aprobarlo como delito y en el Pleno, en el curso de estos días, vanamente tratarán de vacar al Presidente; es decir exhibirán ante el mundo la disminución mental de los políticos peruanos. Considerar una idea o un proyecto como delito es el colmo de la imbecilidad.
A este objetivo, están abocados los congresistas tanto de la oposición como del gobierno.
Esta convulsión por «imbecilidad», felizmente solo afecta al sector político del país mientras que los problemas sociales y económicos van por su curso, determinados por los líderes del Perú profundo que están jaqueando a las transnacionales, si bien debilitadas, pero aún vigentes por estupidez e imbecilidad. Por ejemplo, el no derogar hasta ahora la Resolución Ministerial 372 concerniente a «Las Bambas» y permitir que del mineral extraído, el Perú no recaude su mínimo 20% que le corresponde.
Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter e Instagram, y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.