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"Defendamos el bienestar de las gallinas ponedoras"

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Fecha Publicación: 11/12/2021 - 23:00
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Como si leyéramos Alicia en el País de las Maravillas, emblemática novela de Lewis Carroll, sin nada más que hacer que fabular tonterías propias del envidioso, resentido, social y fracasado político partido Morado, en medio del cataclismo nacional en que nos encontramos dos parlamentarios suyos acaban de presentarle al Parlamento un proyecto de ley, demandando se “garantice el bienestar de las gallinas ponedoras (no es broma, amable lector; esto es los que piden) y la eliminación del uso de jaulas para su crianza.” La propuesta es que su solicitud se atienda ”a través de la implementación progresiva (temporalidad/gradualidad) de un sistema libre de jaulas y ´semi pastoreo´, que protejan a las gallinas de cualquier sufrimiento o daño causado durante la crianza, transporte y sacrificio.” Es tal el estrato de alucinación de esta dupla parlamentaria, digna de que su proyecto se presente y triunfe de lejos ante algún concurso universal de tontos, que exigen al Congreso “velar por los cinco principios (libertades) de vida de las gallinas ponedoras” Aunque la pregunta elemental es, ¿pero quién ha descubierto esos ´cinco mandamientos´ de la subespecie doméstica Phasiandae, derivada de una familia que procede del sudeste asiático? ¿Un gallo, gallina, un pollo? No amigo lector. ¡Quien lo ha revelado es el partido Morado! ¡Un partiducho fabricado por los caviares, dedicado a fabricar humo para nublarle el panorama al ciudadano! El siguiente es el pentálogo de preceptos de los “Galllus gailuos”, como científicamente se conoce a las gallinas ponedoras; esos cinco mandamientos que los peruanos estamos obligados a proteger, según sentencia la dupla Susel Paredes/Edward Málaga del partido Morado. Leamos; 1) las gallinas ponedoras deben estar libres de hambre, desnutrición y sed; 2) estas gallinas deberán estar libres de miedo, angustia, estrés; 3) deben estar libres de incomodidades físicas y/o térmicas; 4) deben estar libres de dolor, enfermedades y heridas; y 5) deben tener la libertad para expresar su comportamiento natural.

Si hasta acá, amable lector, usted sigue creyendo que esto se trata de alguna broma de mal gusto, ajústese el cinturón. Los congresistas Susel Paredes y Edward Malaga exigen que “las gallinas deben contar un plan de salud que incluya controles regulares y cura de lesiones. Y resaltan que, si una ave tiene una enfermedad incurable, puede aplicarse su «derecho» a la eutanasia”.

Pregunta. ¿Es posible que en medio de la crisis descomunal en que nos encontramos, este par de burócratas, pagados con su dinero, amable lector, se dediquen a perder el tiempo en tantas estupideces? ¿Es dable que dos congresistas antepongan el derecho de las gallinas ponedoras a la catastrófica situación de millones de peruanos que viven en condiciones infrahumanas? ¿Qué ocurre en el Perú para que dos lunáticos exhiban semejante desprecio por el ser humano privilegiando a las gallinas ponedores, cuando por culpa del gobierno comunista -que preside Castillo- ha desaparecido el trabajo y la capacidad del ciudadano para atender sus hogares? ¿Es posible permanecer ciegos, sordos, mudos ante tan terrible afrenta, permitiendo que dos mequetrefes malversen nuestros impuestos para lucirse tan grotescamente?

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