Derechos humanos emergentes
La historia evoluciona y con ella los derechos humanos. Trascendemos los pilares fundamentales que surgieron tras la Revolución Francesa: libertad, igualdad y fraternidad (Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, 1789), y damos origen a derechos emergentes.
Estos son aquellos que han cobrado un interés creciente en respuesta a desafíos específicos de la actualidad. Entre estos desafíos se incluyen la privacidad digital, el acceso a la información, la protección del medio ambiente, el reconocimiento de las minorías y nuevos enfoques sobre la identidad, entre otros. Lo fascinante de estos derechos es que surgen de la necesidad de ajustar nuestro marco legal y ético a las cambiantes realidades de nuestra sociedad, sin dejar de lado los principios y el espíritu de la legislación que rige en cada país.
Es importante recordar que los derechos que disfrutamos en la actualidad han evolucionado con el tiempo, tanto en su concepción como en su aplicación, desde su desarrollo a lo largo de la historia, consenso y compilación en la Declaración Universal de Derechos Humanos (ONU, 1948). A partir de ello, hemos tenido un punto de partida para reinterpretar y enfocar estos derechos de nuevas maneras, dado que los derechos individuales, sociales, políticos y económicos que se entendían en los años 50 fueron percibidos de manera diferente en la década de los 90, y hoy día se presentan con enfoques distintos que, seguramente, cambiarán nuevamente en el futuro.
Echemos un vistazo a algunos ejemplos de cómo estos derechos han evolucionado con el tiempo. El derecho a la educación ha evolucionado para centrarse en la calidad de la enseñanza. La igualdad ha avanzado de la mera justicia hacia una búsqueda de equidad. La privacidad se ha transformado con la llegada de los entornos digitales, dando lugar a la noción de la “persona digital”. La identidad ha pasado de ser una realidad fija a una construcción ideal y personal. El derecho a elegir y ser elegido se ha expandido para incluir la creencia en el azar.
Vemos así que los derechos humanos emergentes son el resultado de la constante evolución social y de los desafíos legales que surgen al intentar regular el actuar humano en sociedades tecnológicas y complejas.
Conforme avancen los años, es esencial recordar que los derechos humanos emergentes deben ser aplicados de manera igualitaria para todos y es necesario adaptar nuestras leyes y normas éticas para abordar las necesidades y nuevos desafíos en la búsqueda de una sociedad más justa y equitativa, tal como lo expresó Ossorio y Gallardo en “El alma de la toga” de 1919: “el derecho se transforma constantemente”.
Abogado, docente universitario, consultor legal
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