Desabastecimiento de más de 400 medicamentos a nivel nacional
Hace aproximadamente cuatro meses, en noviembre del 2023 el Gremio de Salud COMSALUD y la Cámara de Comercio de Lima sacaron un comunicado advirtiendo al ministro de Salud Dr. César Henry Vásquez Sánchez y a la presidenta de EsSalud Dra.
Maria Elena Aguilar del Águila que tendrían desabastecimiento de productos farmacéuticos, dispositivos médicos y servicios de salud si continuaban con las deudas impagas a los proveedores, si seguían sin emitir las órdenes de acuerdo a los contratos, en resumen si continuaban con la mala gestión.
Hoy se está cumpliendo ese desabastecimiento y esto lo ha confirmado un reportaje de ECdata de Mayte Ciriaco Ruiz del último 28 de febrero donde hace un análisis a las cifras de medicamentos esenciales de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (DIGEMID) indicando que existe desabastecimiento de más de 400 medicamentos esenciales a nivel nacional y un substock o falta de cobertura de demanda de 490 medicamentos.
Nos dice que el 66% de establecimientos de salud no cuenta con stock en al menos un fármaco, y que actualmente, solo diez regiones del país superan la tasa del 80%, que es el porcentaje mínimo para considerar que hay alta disponibilidad, mientras que cinco no alcanzan ni el 70%.
Entre los diez medicamentos con mayor desabastecimiento están aquellos que se utilizan para tratar reacciones alérgicas, infecciones, anemia, neumonía o efectos secundarios por tratamientos oncológicos.
En diversos establecimientos de salud, incluso, hay desabastecimiento o substock de ibuprofeno o amoxicilina. La escasez en algunos establecimientos de salud ya había sido advertida. A fines del 2023, la contraloría reportó el desabastecimiento de 26 medicamentos esenciales en el Hospital Dos de Mayo. Pese a ello, más de un mes después, no hay stock de 28 fármacos, como el antiepiléptico gabapentina o los oncológicos flutamida e imatinib.
Los 8 medicamentos con el mayor desabastecimiento son epinefrina, para reacciones alérgicas graves; ciprofloxacina y tetraciclina, para tratar o prevenir infecciones bacterianas como la neumonía; sulfato ferroso, para anemia; magnesio sulfato para preeclampsia, eclampsia, y efectos secundarios de tratamiento oncológico; yodo povidona, para desinfectar y prevenir infecciones; dexametasona, para aliviar inflamación; amoxicilina, que es un antibiótico.
Esta situación perjudica directamente a los más pobres porque son quienes tienen que ir a comprar a una farmacia los medicamentos que no encuentran en los Hospitales del Ministerio de Salud y EsSalud. El otro gran problema es que al existir desabastecimiento de dispositivos médicos no pueden programar las cirugías necesarias y los pacientes tienen que buscar clínicas particulares para poder operarse antes de que sus situaciones de salud se agraven.
Las razones son muchas, pero lo principal es que los pacientes no son el centro de este gobierno.
@sandrostapleton
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