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Desaceleración global y reactivación interna

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Fecha Publicación: 15/01/2023 - 04:35
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El crecimiento económico de 2022 se basó en la mayor expansión del consumo, principalmente en el primer trimestre, pero después fue disminuyendo por el efecto de la política monetaria de incremento de intereses para controlar la inflación.

El Banco Mundial ha reducido las perspectivas de crecimiento global a 1.7% en 2023, por debajo del 3% pronosticado, debido a que la inflación y los intereses continúan altos. Esto impacta, particularmente a las pymes, que, según informe del FMI, son hoy los mayores empleadores del mundo. Recordemos que, en el Perú, el 80% es informal económica y laboralmente.

El crecimiento de las economías avanzadas bajaría en 2023 a 0.5% en EEUU y 0 en Europa; mientras que China crecería 4.3%. Asimismo, se prevé que América Latina y el Caribe solo crezcan en promedio 1.3%. El Perú se desaceleraría de 2.9% a 2.6%.

En un contexto externo de posible recesión mundial, y un contexto interno de conflictos sociales, el gobierno del Perú apuesta por reactivar la economía del país, destrabando la ejecución de la inversión pública, para que genere empleo, lo que permitiría activar la inversión privada y la inversión extranjera y, en general, el retorno de capitales desde el exterior.

Sin embargo, el retorno de capitales y/o de la inversión extranjera sólo puede lograrse si hay control sobre los conflictos sociales, en particular los que existen alrededor de los sectores rentables que la incentiven (minero-energético, telecomunicaciones, y otros). Y, por otro lado, el BCRP ha señalado que la inversión privada habría caído 0.5% en el 2022, y espera que en 2023 repunte en 1%.

El presupuesto público no ejecutado fue superior a los 18,000 millones de soles, de los cuales 16,000 millones corresponden a los Gobiernos Regionales, esto debido a 2624 proyectos detenidos a nivel nacional: 2,018 locales, 350 regionales y 256 nacionales.

Por otro lado, la reactivación se daría en un contexto de reducción del consumo, el mismo que ha sido frenado por la constante elevación de la tasa de interés de referencia, por la política monetaria del BCRP para pretender reducir la inflación, la misma que tiene básicamente un componente externo, por lo que el incremento de los intereses debe ser revisado en el 2023, pues, a pesar de todo, el BCRP ha manifestado su temor a que solo se pueda bajar la inflación hasta el 4% como rango meta.

La masificación de las redes de gas es un proyecto a mediano plazo, que todavía no cuenta con la aprobación del Congreso, pero que implica tendido de redes, derechos de conexión y un sistema de instalaciones internas, que se pretende sea masificada sin libre competencia y que se financie con los recursos de los ciudadanos (tributos). Según estimaciones de Proinversión, demandaría una inversión de 300 millones de dólares.

Actualmente, Lima concentra el 86% de las conexiones, y 14 regiones aún no tienen acceso al gas; la crisis internacional de combustibles alcanzó al Fondo de Seguridad Energética – FISE, y sus recursos para el 2023 están por debajo del 50% (de S/1,800 a S/ 800 millones), lo que afecta la viabilidad financiera para iniciar la construcción de ductos en todo el país.

El Ministerio de Economía ha propuesto un nuevo programa “Con Punche Perú”, con un costo fiscal de S/ 250 millones, y con un corte de corto plazo coyuntural (entre tres y seis meses), que busca ejecutar una inversión pública de 5,900 millones de soles, que propiciarían la creación de 130,000 puestos de trabajo, aspirando a una ejecución del 20% del presupuesto de inversión pública en el primer trimestre.

Es necesario aprender a ejecutar proyectos de inversión. Actualmente tienen problemas de promoción en las modalidades más eficientes (de gobierno a gobierno, obras por impuestos, asociación público privada), que demandan la reforma de Proinversión, para su modernización.

En el Perú, alrededor de 800,000 pymes quebraron debido a las consecuencias de la pandemia y solo 200,000 intentan recuperarse. Los subsidios y créditos no han sido efectivos.

La inflación cerró el 2022 en 8.46%, la tasa de interés de referencia cerró en 7.50%, y no se descarta que el ciclo alcista de la tasa de interés se extienda más allá del mes de enero, pese a su costo social.

La tasa de interés real del BCRP, descontada de la inflación, está ahora en 2.8%, nivel por encima del 1.5%, que el banco considera como neutral (ni contractivo ni expansivo). Con el posible aumento previsto para enero, tendríamos 3.8% de tasa de interés real.