Despertares

En el budismo lo mejor que te puede pasar es que te desilusiones, si entendiste bien, perder la ilusión es ver las cosas tal cual son, la ilusión es una imagen y desilusionarse puede ser ver la realidad tal cual es, se rompe la ensoñación y la vida parece un poco más dura, pero ante todo se convierte en consciencia viendo la realidad con gratitud, amenguara todos los procesos de entendimiento de lo que se vive; las personas que profesan el budismo más acérrimo dicen que desilusionarse es: “Despertar”.
¿A qué se le llama despertar?

Se llama despertar de la conciencia, cuando salimos de nuestro proceso natural de ver nuestra vida, hacia la ruptura de paradigmas y creencias que nos llevan al sufrimiento, la que nos crea la ilusión de la mente, al salir de ellos, de este proceso natural en todas las personas, incluyéndome a mí, viendo todo como con otro lente las situaciones. ¡Sí! el lente del aprendizaje que todo tiene su propósito de ser, y ahí es donde empezamos a desapegarnos de lo que queremos que suceda hacia la confianza en ver sensatamente las realidad sin frustración o enojo sino con compasión y gratitud; ¡los cambios internos desde este punto es el cambio a todo!
Abrirnos a la conciencia o a ese despertar nos ofrece conocimientos que cambian paradigmas, que ayudan a comprender las relaciones con otras personas, a cerrar ciclos y superar pérdidas, a tomar decisiones asertivas y entender la relación con lo material desde muchas perspectivas, incluyendo la interna o llamada espiritual.
La mente nos crea un ambiente desde las sobre dimensionadas expectativas personales, a vivir en ilusión, aceptándolas como realidad cuando no lo es, llevándonos a un interminable ciclo de autoengaño, porque es más cómodo así, vivir en el “automático” o en tu zona de “confort”, que realmente no lo es, para no enfrentar la mera realidad, entrar en los aspectos de entender acerca del Desapego (cuando menos esperes de los demás, sufres menos en la vida), para desaprender patrones de víctima, de control y de manipulación.

Tenemos conductas aprendidas desde la infancia, de los padres, abuelos, instalándose en nuestro inconsciente, es por eso, que, si quieres que tus hijas no entren en dependencias, iguales a las de uno, te insto a ese abrir los ojos para el auto análisis con amor y visto desde el aprendizaje, para después empezar a romper esas cadenas del dolor y sufrimiento.
¡Cuando tú cambias, todo cambia!, tus perspectivas son distintas, además tu estado vibracional cambia; esto quiere decir tu energía cambia junto con tu sensación interna, hacia el amor propio y la confianza, conectando con algo dentro de ti que abre las puertas de las oportunidades aun en lugares que no lo crees así.
Si podríamos ver las situaciones difíciles dejando de sentir sufrimiento, sino agradeciendo por ver las cosas como son en realidad, sería de esta manera salir de la ilusión de la mente, que es lo que más se busca. Entonces la práctica del desapego iría de la mano para estar en el presente, en presencia con uno mismo, dándose cuenta de cuáles son nuestras carencias que hay que abrazar con amor, porque fueron los que nos trajeron a la situación difícil o a la persona que nos hace tener conflictos y nos lleva a sentirnos dañados.
¡Espero que a través de esta lectura pueda animarte a tener otra perspectiva de las circunstancias de sufrimiento y/o pensamiento de ansiedad, para llevarlo al cambio! De eso se trata la columna de hoy, por eso ten en cuenta que hay una ventana para descubrirte y abrazar nuevas oportunidades, desde la práctica para una vida consciente.
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