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Dina Boluarte está jugando con fuego sobre un polvorín

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Fecha Publicación: 21/09/2023 - 22:10
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Dina Boluarte sigue “matando” su precaria reputación de mandataria, pedirle que piense y actúe en su rol de estadista como parte de su sinuoso mandato presidencial es pedirle demasiado, continúa “telegobernando” de manera remota el Perú, embriagada por un ego jactancioso y deslumbrada por los rascacielos neoyorquinos que la hicieron sentirse menos terrenal y más alienada por las maravillas gringas, luego de verla sumisa e indulgente en sus intervenciones como mandataria, consintiendo algunas humillaciones a su alta investidura y pasar por alto menosprecios que han sido fácilmente asimilados por una “imitadora presidencial”, alguien que no siente la personificación de millones de peruanos bajo su manto presidencial, la observamos avergonzados y nada representados por su pobre desempeño presidencial en EE.UU., la vimos menos peruana, menos ejemplar, menos atinada, menos humilde, menos presidenta de los peruanos.

Fue patético comprobar que no funcionó el microsueño americano de Dina, se derritió el maquillaje de grandeza de su cargo y terminó siendo lo que siempre ha sido, una desenmascarada con su conocido y grosero comportamiento achorado atacando absurdamente a una periodista peruana, reprochándole con esa vulgaridad propia de los chuscos y endiosados con el poder que los hace creerse los dueños de Palacio de Gobierno cuando son simples inquilinos precarios, para finalmente espetarle a la periodista que los problemas del Perú se tratan en Perú, luego que ella misma desde EE.UU. anunciara las medidas de emergencia para imponerlas en tres distritos de Lima hoy convertidos en tierra de nadie como muchísimos lugares del Perú.

Dina es una operadora astuta y cínica con su juego político caleta, vive su propia dicotomía, “roja por dentro y blanca por fuera”, una bipolaridad política muy común entre los caviares, un modelo mordaz y tramposo, que Dina conoce y lo usa para sobrevivir con su transitorio mandato presidencial y evitar ser desalojada de la Casa de Pizarro.

Qué nos espera con la gestión torpe, precaria y autodestructiva de DB, danzando sobre su propio polvorín, las diferentes encuestas le dan más del 80% de desaprobación y sigue subiendo el rechazo a su gobierno ineficiente, corrupto e incompetente, la delincuencia sigue acorralando al Estado, la capacidad de acción y reacción del Gobierno de DB ha desnudado una clamorosa ineptitud y reflejos tardíos para hacer virajes oportunos y urgentes para el país.

Carece de olfato político y técnico para atraer habilidades y capacidades diferenciadas para encarar el crimen y la delincuencia que está cada día mejor organizada y financiada para seguir impune apoyada por malos policías, jueces y fiscales fermentados por la corrupción, camuflados en su pacto diabólico con el crimen. La economía sigue decreciendo con una recesión indetenible, tenemos un cementerio de pequeñas y medianas empresas quebradas, más desempleo, una crisis política devorando la estabilidad e institucionalidad del Perú. ¿Le habrán informado los cortesanos de Dina que ya empezó el principio del fin? ¿Ayer embriagada y hoy resaqueada por el poder, aún seguirá creyéndose el cuento que la Presidencia de la República era para ella?…
He dicho.

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