ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

Dina la viajera

Imagen
Fecha Publicación: 28/05/2023 - 22:50
Escucha esta nota

Dina Boluarte quiere conocer el mundo y gozar de la pompa y el boato de recepciones oficiales. Lamentablemente para ella, no puede hacerlo sin violar flagrantemente la Constitución.
El artículo 115° dice claramente: “Cuando el Presidente de la República sale del territorio nacional, el Primer Vicepresidente se encarga del despacho. En su defecto, lo hace el Segundo Vicepresidente.”. Punto. No hay lugar para interpretaciones auténticas ni malabarismos pseudo legales.

Así lo sostienen destacados juristas como Enrique Ghersi (RPP, 16/5/23), Humberto Abanto (Willax TV, 25/5/23) y Natale Amprimo (Expreso 26/5/23). En todo caso, tendrían que modificar la Constitución en dos legislaturas ordinarias.

Hoy día se ha producido una anormalidad consecuencia de las sucesivas crisis políticas que han ocurrido en los últimos años: no existen vicepresidentes, un hecho absolutamente inusual. Pero esa es la realidad, por tanto Boluarte no puede salir a deambular fuera del Perú.

Los argumentos del Gobierno y de un nuevo séquito de congresistas oficialistas para tratar de justificar ese despropósito, son ridículos. Dicen que se requiere la presencia de Boluarte en el mundo para contrarrestar las demenciales diatribas de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) o Gustavo Petro. Eso es más que dudoso.

Para empezar, AMLO no ha necesitado moverse de su país para hacer campaña contra el Perú. Lo hace en sus conferencias de prensa diarias –mañaneras– en el Palacio Presidencial.

En segundo lugar, Boluarte, si bien no es tan ignorante e incompetente como Pedro Castillo, no está muy por delante del ignaro hoy recluido en Diroes. Su desastrosa presentación en el foro de Davos hace un año es un ejemplo de eso. No tiene la oratoria ni la cultura de Alan García, ni el recorrido y el conocimiento de Pedro Pablo Kuczynski, capaces de alternar, y eventualmente persuadir, a políticos y empresarios de cualquier país.

Por último, el argumento del oficialismo es un búmeran: si dicen que puede manejar el Gobierno desde el exterior con videoconferencias, igualmente puede comunicarse por el mismo medio con cualquier presidente o auditorio extranjero. Con la ventaja que podría tener un teleprompter para leer un discurso o responder una pregunta sin desbarrar.

En suma, las consideraciones del oficialismo son deleznables. Pero si la Constitución no lo prohibiera, Boluarte podría pasearse por el mundo y gozar de las mieles del poder. Pero no puede hacerlo sin exponerse a un nuevo argumento para la vacancia.

Otro sí digo. Se presentó el informe de Amnistía Internacional –organización politizada convertida en vocera de izquierdistas y comunistas–, con las mismas monsergas y necedades del de la CIDH: ha habido ejecuciones extrajudiciales, el problema del Perú es el racismo, etc. Esta vez Gisela Sánchez, hija de un policía asesinado por el terrorismo, incursionó en el evento con un grupo de valientes ciudadanos y puso en su sitio a esos insolentes activistas de izquierda, enemigos de las FF.AA. y PNP.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.