¿Dónde están las vicuñas?

Hasta antes de la pandemia, la población de vicuñas en la Reserva Nacional de Pampa Galeras bordeaba los treinta mil ejemplares. La pampa se veía llena de vida y se disfrutaba viendo corretear a las vicuñas, con cuya rapidez centelleaban la pampa en distintas direcciones.

Era un hermoso espectáculo que permitía reflejarse a las altas punas en el bajo cielo. Sin embargo, en estos días, si cruzas el inmenso llano apenas divisarás una que otra vicuña; si la suerte te acompaña o si te has levantado con el pie derecho lograrás ver una tropilla, de ser así, da gracias porque tienes mucha suerte. Pareciera que el castigo final se nos ha adelantado y la tierra se las ha tragado: esta es la cruda y cruel realidad imposible de asimilar.

Esta es una lamentable y trágica desgracia que nos puede golpear mucho más. Estamos a milímetros de lamentar una tremenda catástrofe de consecuencias mayores: nuestras vicuñas, en la que era la Reserva más grande del mundo, están cerquita de la extinción y es un hecho de tal magnitud como si de pronto alguien borrase de un plumazo a la vicuña de nuestro escudo nacional. A lo largo de la historia hubo también graves amenazas a la vicuña: los cazadores furtivos, algunos eventos climáticos, sequías y otros, pero ninguno con la dimensión que vemos hoy. Ahora la sarna es la plaga que ha desatado toda su furia y ataca silenciosamente a nuestro indefenso animalito.

Esta situación no fue entendida y menos atendida por los sectores involucrados y se agravó en tiempos de pandemia. Son muchos los responsables: la Comunidad Campesina de Lucanas, el Ministerio de Agricultura, el Estado, las organizaciones defensoras de los animales en peligro de extinción y también somos culpables quienes callamos con nuestra indiferencia. ¡Tenemos que reaccionar! Es urgente una acción conjunta para enfrentar resueltamente esta tragedia y poder salvar a los pocos animales que sobreviven.

En estos días se debería estar celebrando la fiesta del Chaccu, una ceremonia ancestral, ejemplar por el hondo significado de respeto y convivencia con la naturaleza, ceremonia donde los comuneros deberían reunir a miles de vicuñas y esquilar su valiosa fibra, tal y como se hacía desde tiempos del incanato, pero todo indica que será apenas una ceremonia simbólica.

Ojalá sea el inicio de una campaña seria para enfrentar la plaga. No vaya a ser que sea muy tarde y tengamos que lamentar la extinción de nuestras vicuñas y conformarnos con ver fotos y videos de ceremonias de años pasados. Esta es una advertencia.

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