Dramático: 68.8% de personas adultas mayores sin filiación a un sistema de pensiones
Más allá de homenajes, que están muy bien y se lo merecen, a nuestras personas adultas mayores que ayer 26 de agosto celebraron su día, haría bien el Gobierno de cumplir su parte de la “Política Nacional Multisectorial para las Personas Adultas Mayores al 2030”, aprobada por D.S. Nº 06-2011-MIMP en junio del 2021, que se ha planteado cinco objetivos claros en favor de estas poblaciones vulnerables, entre los que se cuenta el de “Garantizar el derecho al cuidado y buen trato para una convivencia sin discriminación”, así como “Garantizar prestaciones contributivas y no contributivas”, teniendo en cuenta que un buen porcentaje de personas mayores de 60 años en el país son victimas de maltrato inclusive en el seno de sus propios hogares o no se les brinda los cuidados necesarios que lo frágil de su edad exige, si acaso la persona adulta mayor viviese en el seno de una familia, los hay sin vínculos parentales que viven en situación de calle o en algún albergue del Estado, por lo pronto hasta abril de 2020 en el Ministerio de la Mujer reportaban 146 Centros de Atención del Adulto Mayor en 21 regiones del Perú, refugio de una población de 3,697 personas, de cuyo universo 57% son mujeres y 43% hombres.
Desde esta columna se invoca a la Presidenta Boluarte a cumplir con su ofrecimiento dado a conocer en reciente actividad pública, de mejorar el presupuesto el año entrante del Programa Social de Pensión 65, con el fin, según dijo, de cerrar al 100% la brecha de atención a las personas adultas mayores, para lo cual es imprescindible recordar la estadística de la Defensoría del Pueblo, de la existencia de que más de 209,000 personas adultas mayores que no acceden al citado programa pese su estado de postración de pobreza y pobreza extrema.
Es de rescatar el anuncio de elevarse los montos mínimos de las pensiones cuyo público objetivo son precisamente adultos mayores, el de los jubilados del D.L. 19990 de 500 a 600 Soles y el de los pescadores, que tendrían un sueldo base de 360 Soles, por supuesto todo esto deberá pasar el tamiz del Congreso, pero estimo que se aprobará sin mayor dificultad.
La situación de quienes peinan canas mayores de 60 años es lastimera, ya que según el INEI al 2022 el 68.8% de personas adultas mayores no cuenta con afiliación alguna a un Sistema de Pensiones, todo lo cual urge ser revertido porque de lo contrario se les está condenando a la mendicidad.
Otro tanto es la contratación de más médicos especialistas en geriatría y gerontología en los establecimientos de salud pública y en los albergues.
Esto es lo primero que hacer en cumplimiento de la citada Política en favor de los adultos mayores, que ha sobrevivido a las gestiones de Sagasti y Castillo y le sobrevivirá a la de Boluarte y de su sucesor, porque así son las Políticas Públicas, se planifican con visión, en este caso, al 2030. Nuestros adultos mayores son pilares de sabiduría, la misma que forma parte de nuestras tradiciones históricas. Tratémosles con dignidad.
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