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Economía pasará a segundo plano la justicia carcelera

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Fecha Publicación: 09/03/2020 - 20:40
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El protagonismo de fiscales y jueces, con sus mandatos abusivos de prisiones preventivas, ha ocupado la agenda de la opinión pública nacional, desde hace dos años. Preveo que este año las cosas irán cambiando rápidamente, el desempeño de la economía pasará a segundo plano toda la parafernalia acusadora de la dupla Ministerio Público y Poder Judicial.

El magro crecimiento del PBI del año pasado se siente en el bolsillo de empresarios y ciudadanos. El mercado se ha vuelto predatorio en precios, menguando ingresos y oneroso en la gestión de la cobranza, el pago diferido entre 60 a 90 días, se ha vuelto moneda corriente. La liquidez es escasa.

En los dos primeros meses del año, la inversión pública ha crecido en 53.8% pero nada garantiza que se cierre el 2020 con la proyección estimada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), del 6%.

A este escenario incierto, se suma el efecto del coronavirus, estimado inicialmente con un conservador impacto de 0.3% en el PBI. Lo que venimos observando justo a la llegada de la enfermedad a nuestro país, es una disminución de las exportaciones, una caída del precio de las materias primas, incremento en el tipo de cambio y una continuación de la recesión de la industria manufacturera. La conjunción de elementos para la tormenta perfecta.

El shock a la baja en la demanda externa, generará menores ingresos en dólares por la caída del volumen de ventas y de precios, a lo que se sumará un refugio de los agentes locales en el dólar, la tendencia alcista del tipo de cambio está cantada. Podrá ser paliada mientras podemos disponer de recursos suficientes en las reservas internacionales para tal fin, no hay caja infinita para el control. Este hecho alimentará una tendencia inflacionaria, dado que hay muchos productos y servicios atados al valor del dólar.

La menor demanda exportadora tendrá efectos en el empleo, sobre todo en el sector agroindustrial, afectará la demanda interna, disminuyendo el crecimiento y la producción, gestando un shock de oferta. Se sumará a estos hechos, el mayor gasto en el sector salud.
La escasez de liquidez aumentará y la economía será el tema de interés ciudadano. Reto para el Banco Central de Reserva y el MEF, que deberán trabajar arduamente.