ÚLTIMA HORA
PUBLICIDAD

El conde Nicanor

Imagen
Fecha Publicación: 23/11/2023 - 22:20
Escucha esta nota

El conde Nicanor no es el conde Lucanor, aquel noble castellano que en la literatura medieval pedía consejo a su fiel Patronio y sacaba de ellos ejemplos morales. Nicanor es el hermano de la presidente Dina Boluarte y está causándole con sus actos problemas serios a su hermana. Esta por lo visto lo quiere mucho a tal punto de haberlo defendido con uñas y dientes cuando empezaron a destaparse las andanzas de Nicanor en su fiesta de cumpleaños. Lo cierto es que Nicanor está formando una corte paralela al gobierno con una serie de pedigüeños que son autoridades regionales, municipales y demás. La razón por la que estos acuden a Nicanor es muy simple: el hermano tiene acceso directo e informal a la hermana que es la Jefe del Estado y de gobierno. El ya clásico clisé “que se investigue” mantiene ocupados a Dina Boluarte y sus ministros ante cada cuestionamiento de la prensa (y ahora del Congreso y de la fiscalía). Obviamente las preguntas van a seguir mientras sigan a su vez las correrías políticas de Nicanor. El contexto es que el gobierno de la hermana de Nicanor está pegado con babas. Sus porcentajes de aprobación son decrépitos y en el Congreso la sostienen por su propio interés ya que no tiene bancada. Ya le censuraron a un ministro y pueden haber más. Las cosas no pintan bien para la presidente, con una recesión y sin un rumbo reconocible en la economía ni en seguridad ciudadana que son hoy los temas más importantes que afligen a los peruanos. ¿Qué debe hacer Dina Boluarte con su hermano que no ostenta ningún cargo público? Patronio le aconsejaría a Lucanor que siga los consejos que brinda la historia. Yo le aconsejo a la jefe del Estado que realice una operación quirúrgica con Nicanor que va a demandarle un sacrificio de tres años, hasta que termine su mandato si quiere que este culmine en 2026. Ejemplos. El príncipe Andrés. Su imprudente amistad con el pedófilo Jeffry Epstein, aún después de haberse sabido en lo que estaba involucrado supuso un baldón para la monarquía británica. Siendo el hijo preferido de la reina Isabel, esta no tuvo reparos en apartarlo del entorno de la familia real con lo que la institución monárquica dejó de sufrir el asedio mediático y el ruido se acabó.

Otro que fue expectorado fue el príncipe Harry y su esposa. Su falta de compromiso con sus deberes reales y su actitud traicionera para con su propia familia lo condenaron a la degradación y al exilio en Hollywood donde se dedican hoy a la vida farandulesca. Ahora nada de lo que hagan contamina a la familia real, liberados de Andrés y Harry. Un pariente cercano que fue condenado al ostracismo fue nada menos que el ex rey Eduardo VIII, duque de Windsor. El abandono del cargo por su capricho de casarse con una divorciada americana lo condenó a ser un paria y solo en contadas ocasiones pudo volver a Inglaterra autorizado por la reina Isabel. Y ya que hablamos de reyes, ahí tenemos el caso de Juan Carlos de Borbón, emérito de España. Su falta de juicio al enriquecerse por lo bajo gracias al alto cargo que ostentaba así como sus correrías en safaris mientras el pueblo sufría una crisis económica, además del escándalo con una amante arribista que lo desplumó causó su abdicación. En España es tan mal visto que el rey Felipe VI, su hijo, le dijo que tenía que partir al exilio. Ahora vive como un jeque en tierras arábicas. No fue el único de la dinastía Borbón que sufrió el ostracismo. Los duques de Palma, hija e hijo político de Don Juan Carlos, fueron eliminados de la familia real tras estar involucrados en un escándalo de fraude fiscal que terminó con el yerno tras las rejas. Como puede verse, aquellos que quieren sobrevivir cortan con los parientes más allegados y queridos no importa si se trata de hijos o padres. ¿Qué se le pide a la jefe del Estado? Pues algo muy sencillo, a saber, que corte con su hermano y le ponga coto a su acceso. Si los pedigüeños que rodean la pequeña corte del conde Nicanor constatan que este ya no tiene ninguna influencia sobre la hermana y que no tendrá comunicación con ésta hasta el 28 de julio de 2026, pues desaparecerán del mapa. Un problema menos para una presidente que ya tiene gravísimos problemas que resolver como para que le estén preguntando, indagando y ventilando las correrías de su hermano.

Mira más contenidos siguiéndonos en Facebook, Twitter, Instagram, TikTok y únete a nuestro grupo de Telegram para recibir las noticias del momento.