El ministro del chip

El ministro de Energía y Minas Jorge Luis Montero ha anunciado su estrategia para terminar con la minería ilegal e informal en el país, sobre todo en la zona de Pataz donde se ajusticiaron a 13 mineros en un socavón de una mina con el fin de robarles el oro. Según lo que he entendido de lo dicho por el ministro, el REINFO ha fracasado y por lo tanto su fecha tope es hasta fin de año si es que el Ejecutivo lo prorroga hasta esa fecha, pues según la ley del Congreso está vigente hasta este 30 de junio de 2025. Ahí el ministro Montero anuncia una nueva ley que reemplace al REINFO cuya operatividad se pondría en juego, entre otras cosas con un chip. La estrategia es la siguiente si mal no entiendo. Ahorrarse un engorroso papeleo al que se asume el fracaso del REINFO que en más de una década no ha logrado formalizar más que 2% de mineros. La idea sería usar la tecnología para crear una cadena de seguridad que pueda identificar en tiempo real el lugar de donde se extrae el metal, por donde se transporta, dónde se trata y quién lo compra, recibiendo los impuestos de ley que se debería pagar y el 98% de mineros informales-ilegales no pagan. Cada minero operaría su propia tecnología a través de un app que se bajaría al aparato celular y, según expresa declaración del ministro Montero, lo convertiría en un minero formal porque cumple con toda la “línea de custodia” que le interesaría identificar al Estado con fines económicos y de seguridad. ¡Sancta simplicitas! Si hubiéramos sabido, si a alguien se le hubiera ocurrido que el problema de la minería ilegal e informal se arreglaba con un simple chip, cuántos muertos nos hubiéramos ahorrado, cuánta delincuencia se habría acabado y Pataz no se habría transformado en una zona liberada como un VRAEM del norte. La que sería una buena pregunta para el ministro Montero es si aquel 98% que en más de 10 años no se inscribió en el REINFO lo querían o deseaban hacer, o solo era una finta para seguir operando en la clandestinidad bajo el amparo de una ley. Y esto porque lo que propone el ministro Montero es que quienes hoy están sospechosamente fuera de la ley la hagan cumplir ellos mismos con el chip de marras. ¿Lo harán? ¿Y si no lo hacen? ¿Qué hará el MINEM? Ahora bien, ¿a alguien le funciona el celular en un sótano o en algún ascensor? No creo. ¿Cómo funcionaría el chip del ministro Montero dentro de un socavón minero donde no hay señal? El enorme problema que la minería ilegal e informal está trayendo al país en delincuencia y evasión tributaria es un asunto de corrupción. Donde hay oro hay la enorme posibilidad de corromper autoridades de todo tipo, desde el más bajo hasta el más alto y eso es lo que pasa en Pataz y los partidos y bancadas en el Congreso que ya agrupan a sus asociados “informales.” Lamentablemente, señor ministro, no hay chip para la corrupción al menos que estemos en la época de Gengis Khan y que varios países van poniendo en onda.

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